En España se dice que Philippe Coutinho será del Barcelona en las próximas 48 horas. En Inglaterra, sin embargo, aseguran que eso no es cierto y que no hay reuniones previstas con Liverpool por el pase del delantero brasileño. Lo cierto es que cada vez quedan menos días para que se cierre el mercado de pases y el Barza aún no ficha a un jugador que haga confiar a los aficionados en el proyecto de Ernesto Valverde. Tan solo llegaron Nelson Semedo y Paulinho, jugadores que llegan a complementar al ADN del Barcelona.
De acuerdo a medios ingleses y el periodista Guillem Balague, los ‘Reds’ han insistido que Coutinho no se vende, pese al acto de rebeldía del brasileño de no participar con el equipo. “No hay reuniones previstas con el Barza, no se ha puesto ningún precio por Coutinho, ahora Liverpool no quiere vender”, aseguran en Inglaterra. No obstante, ¿por qué el delantero no jugó en el inicio de la Premier y la Champions League? Todo parece una novela.
El capitán del Liverpool, Jordan Henderson, admitió este lunes que no tiene poder para influir en la decisión del brasileño Coutinho de quedarse en el club inglés.
Henderson salió al paso de los supuestos deseos del brasileño de abandonar la disciplina Red, luego de que el viernes hubiese -supuestamente- pedido al club que le dejase marchar.
El capitán habló desde Alemania, en la previa del partido que el Liverpool disputará el martes ante el Hoffenheim, en la ida del repechaje previo a la fase de grupos de la Liga de Campeones.
"Obviamente es una situación difícil para 'Phil'. Cualquier cosa que diga no ayudará a resolver la situación. Además nosotros, los jugadores, solo estamos concentrados en el partido", indicó.
"Por su puesto, a cualquiera (del equipo) que le preguntes te va a decir que quiere que Coutinho se quede. Es un jugador de clase mundial. He tenido conversaciones privadas con él, pero no creo que pueda influir en su decisión", agregó.
"Estoy muy unido a él y le respeto mucho, pero nada de lo que ocurra tendrá que ver conmigo", concluyó.
Coutinho ya se perdió el sábado el primer partido de Premier (en el que los suyos empataron 3-3 ante el Watford) debido a problemas físicos en la espalda. Motivo por el que tampoco viajó a Alemania con el resto del equipo.