Cuando Barcelona fichó la temporada pasada a Samuel Umtiti, nunca pensó que el mercado de pases se revolucionaría luego de que el Liverpool pagara 84.4 millones de euros por el pase de Virgil Van Dijk. El holandés, con 23 años, se convirtió en el defensa más caro del mundo y, sin mucha publicidad de por medio, ello hace que el precio de otros defensas más cotizados eleven su ficha. Y entre esos jugadores, se encuentra el caso del zaguero francés del Barza.
El fichaje de Van Dijk se trata de una auténtica demostración de fuerza y poderío económico del club en el que juega Coutinho, que se ha adelantado al Manchester City de Pep Guardiola, que quería al holandés. Las instituciones europeas han tomado nota del fichaje y el Barcelona es uno de ellos, especialimente por la sensación de que los 60 millones de cláusula que figuran en el contrato de Umtiti han quedado ya desfasados. Y eso que el francés cumple su segunda temporada como blaugrana.
Su precio, pese a ejercer de defensa central, ya no parece ninguna locura, por lo que el Barcelona, que ya tenía la intención de revisar las condiciones del futbolista, deberá acelerar el tema para evitar cualquier tipo de tentación que pudiera alejar a Umtiti del Camp Nou.
El crecimiento experimentado por Umtiti desde que llegó al Camp Nou no ha pasado desapercibido para las secretarías técnicas de los grandes clubs del continente. De hecho, según publica el ‘Daily Mail’ desde Inglaterra, Manchestar United y Manchester City estarían incluso estudiando la operación y no descartan la posibilidad de llegar a pagar los 60 millones de la cláusula de rescisión del central francés.
En ese sentido, el conjunto dirigido por Pep estaba dispuesto a acometer la multimillonaria operación para firmar a Van Dijk, por lo que parece evidente que el City tiene la necesidad de reforzarse con un central