Raheem Sterling es el delantero que el Barcelona quiere para el mercado de fichajes de invierno (enero 2022). El club azulgrana tiene 20 millones de euros para reforzarse a mitad de temporada y, afortunadamente, hay buenas noticias en tienda azulgrana. Y es que según el diario inglés ‘Mirror’, el delantero del Manchester City ha dado el primer paso para recalar en Camp Nou en los próximos meses. El atacante de 26 años de raíces jamaiquinas decidió frenar las negociaciones de renovación de contrato con el vigente campeón de la Premier League.
Sterling no está convencido de seguir en el Manchester City más allá de junio de 2023, fecha en la que termina el vínculo. El delantero británico ha perdido protagonismo esta temporada con Pep Guardiola y le gustaría cambiar de aires. Y nada mejor que jugar en LaLiga con el Barcelona.
Tal como apunta la citada fuente, el delantero del Manchester City no quiere oír hablar de prolongar su contrato y espera ver lo que sucede en las próximas semanas para tomar una decisión sobre su futuro. Si sigue siendo igual de intrascendente para Pep Guardiola, pedirá salir en el mercado de invierno.
El Manchester City, por su parte, no está dispuesto a dejar ir a Sterling al Barcelona más allá de que no sea un indiscutible para Josep Guardiola. Sin embargo, la presión del futbolista podría obligar a los dirigentes del club británico a sentarse a negociar con el Barcelona.
En los despachos del Camp Nou entienden que Sterling podría ser un revulsivo en el once de Koeman luego de la plaga de lesiones y falta de efectividad en la delantera. Eso sí, el exatacante del Liverpool llegaría solo en condición de préstamo hasta el final de la temporada 2021-22.
Cabe recordar que Sterling es objetivo del Barcelona desde el mercado de verano. El presidente Laporta lo quiso antes que Luuk de Jong, pero el cuadro azulgrana y el Manchester City no terminaron de acordar los términos. Ahora, con 20 millones de euros en caja, la situación podría cambiar.
Sterling está valorizado, según el portal ‘Transfermarkt’, en 90 millones de euros. El internacional con Inglaterra, además de extremo por las bandas, puede actuar como mediapunta. El ‘culebrón’ del mercado de fichajes no ha hecho más que empezar.
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