Riqui Puig, centrocampista del Barcelona que marcó el penal decisivo en la tanda que clasificó a su equipo para la final de la Supercopa de España ante la Real Sociedad, comentó que le “pidió” a su entrenador, Ronald Koeman, “pegarle al quinto” lanzamiento.
“Faltaba uno y fui el primero que le dije al míster que tenía ganas de tirar”, señaló el joven canterano azulgrana.
Riqui Puig manifestó que el Barcelona podría “haber ganado antes” pero se mostró “contento por haber metido al equipo en la final” con un lanzamiento que “sabía dónde lo tiraría” cuando colocó “la pelota en el punto de penal”.
Y este jueves han revelado, precisamente, la reacción del técnico neerlandés cuando Puig pidió ser el encargado de lanzar el tiro decisivo.
Quiere seguir en Barcelona
El jugador culé se mostró dispuesto a seguir en el plantel pese a contar con pocas oportunidades, pues no piensa “arrojar la toalla” con lo que le “ha costado llegar al primer equipo”, de modo que no aceptará las ofertas que puedan llegarle en el presente mercado invernal.
Guillermo Amor, director de relaciones institucionales del Barcelona, alabó lo “bien que ha competido el equipo” y destacó a “Riqui (Puig), que ha metido el último penal y a Ter Stegen, que ha parado varios y eso se cuenta”.
El exfutbolista alicantino admitió que “ha costado mucho porque ellos juegan de tú a tú, dificultando la salida” de balón y, además, “han creado peligro. La Real ha sido un rival magnífico y ha tenido sus opciones”, dijo.
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