El último domingo se vivieron dos escenas paralelas en Europa, pero que claramente grafican el sentir de dos dimensiones que al parecer tienen todo para volver a reencontrarse: Lionel Messi y el Barcelona. Mientras el argentino se retiraba enojado a los vestuarios del Parque de los Príncipes después de la derrota del París Saint Germain ante el Stade Rennais (0-2), en Cataluña todo era fiesta y algarabía luego de la victoria sobre el Real Madrid en el Clásico de España (2-1).
Si bien el club parisino ha estado trabajando en su renovación, es evidente el descontento de ‘Leo’ por el pésimo rendimiento del equipo. Ni siquiera fueron capaces de competir en la Champions League y ahora tienen que conformarse con ser doblegados con mucha facilidad en la Ligue 1. Mientras tanto en el Spotify Camp Nou, un excompañero suyo le abrió las puertas para un futuro The Last Dance.
“Lo esperamos con los brazos abiertos, quién no va a estar preparado para la vuelta de Messi. Al final, no queremos hablar mucho porque quien lo tiene que decidir es él, el presidente, el entrenador o el que sea, pero si es por los jugadores, estamos esperándolo ya”, dijo Sergi Roberto en diálogo con Jijantes, cuando fue consultado sobre el posible regreso del argentino.
Y es que el sentir del capitán del Barça refleja lo que quiere la hinchada ‘azulgrana’: una última historia de amor con Messi, la cual se vio interrumpida hace un par de años por los malos manejos económicos del club y una pésima gestión de su renovación. Ahora, con su descontento en la capital de Francia, la ilusión crece cada vez más.
“Por la eliminación la han tomado con él, pero es que es un jugador espectacular y sabe muy mal que un jugador de este nivel lo traten de esta manera. Aquí lo vamos a tratar muy bien si viene”, recalcó Sergi en referencia a los silbidos que ha recibido ‘Leo’ por parte de la hinchada del PSG.
Luego de la obtención del Mundial Qatar 2022.con Argentina, todo parecía encaminado para que Lionel Messi acepte la propuesta del París Saint Germain de renovar, como mínimo, hasta el 2024. Sin embargo, si bien el propio Christophe Galtier ha confesado que hay tratativas entre el argentino y la directiva, esto se habría enfriado por el mal momento que vive el club.
En términos económicos, el rosarino quiere un salario que se asemeje al de Kylian Mbappé y la seguridad de que ahora sí trabajarán en un mejor plantel para competir en Europa. El equipo parisino no tiene recambios y todo el pese recae siempre en los de arriba, algo que termina siendo contraproducente para el funcionamiento futbolístico del equipo. Veremos qué sucede, si pega la vuelta a España o se queda en un lugar donde evidentemente ya no es feliz.
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