Atrás quedaron los días dorados del Real Madrid a principios del siglo XXI, cuando Florentino Pérez, en su papel de presidente del club, orquestó algunos de los movimientos más impactantes en la historia del fútbol, creando un plantel estelar que aún hoy es recordado con nostalgia. En ese elenco de estrellas brillaban nombres como Luis Figo, Zinedine Zidane y Ronaldo Nazário, pero fue en el 2003 cuando se sumó a la constelación David Beckham. No fue un simple traspaso, sino un fenómeno cultural y de marketing que generó una expectativa sin precedentes. Sin embargo, 20 años después de su llegada, han surgido informaciones explosivas que arrojan luz sobre la vida privada de inglés durante su etapa en Valdebebas.
El programa Socialité de España ha revelado detalles íntimos que podrían sacudir Europa y el mundo a pesar de que ya no está en activo. Según un testigo de aquella época, Beckham habría sido infiel a su esposa, Victoria, y lo que es más sorprendente, su compañero de travesuras habría sido nada menos que Ronaldo Nazário.
“En los años en los que Beckham jugaba en el Madrid, se lo pasaba muy bien con Ronaldo. Yo tengo datos de lo que hacía Beckham en los hoteles de Madrid y son bastante jugosos”, expresó la fuente anónima sobre los exjugadores que hace 20 años llegaron a formar los ‘Galácticos’.
Las revelaciones no se detienen ahí. Según el testigo, Beckham y Ronaldo eran protagonistas de excesos dignos de una película de Hollywood. Pedían más de mil botellas de champán en una sola noche, no con la intención de consumirlas, sino para llenar los jacuzzis de los hoteles donde organizaban fiestas con acompañantes femeninas.
“Se podían gastar 30 o 50 mil euros solo en llenarlo una vez. La cuestión es que no era cosa de una noche puntual. Los trabajadores tenían que llamar a tiendas cercanas para conseguirlas”, agregó la fuente, proporcionando una visión impactante de la vida nocturna de dos de los íconos del fútbol mundial en ese entonces.
Beckham dejó su huella durante cuatro temporadas, entre 2003 y 2007. Disputó un total de 159 partidos, marcó 20 goles y repartió 59 asistencias. Sin embargo, en términos de títulos, la cosecha fue más modesta de lo esperado: una Supercopa de España y una edición de LaLiga.
Estas revelaciones destapan la era galáctica del Real Madrid, un período de glamour y excesos donde las estrellas no solo brillaban en el césped sino que también dejaban huella en la vida nocturna madrileña. Beckham y Ronaldo protagonizaron capítulos de una historia que, hasta ahora, permanecía oculta.
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