El FC Barcelona vuelve a naufragar y Old Trafford ha sido el nuevo escenario de la enésima debacle de los culés en competiciones europeas. Una historia en bucle y que parece no tener final, al menos en el corto plazo. Los culés quedaron eliminados de la Europa League en una noche fatídica, en la que el Manchester United hizo muchísimo daño en la segunda mitad, a pesar del dominio inicial de los culés en el partido.
Ha sido la misma historia de terror a la que se viene acostumbrando el Barça, esté quien esté en el banquillo. Y eso que habían insistido con fuerza en que corregir los errores del partido en el Camp Nou eran clave y, en el comienzo lo consiguieron, pero se vinieron abajo muy, muy pronto. Fueron dos partidos en uno, en la que los culés volvieron a dejar dudas... y que supone un volver a empezar de cero.
Para entender el partido hay que ir por partes, porque son dos cuentos sin ‘nada’ que ver entre sí. Y es que, a pesar de las ausencias de Pedri o Gavi, en los primeros minutos el conjunto azulgrana mostró su versión más convincente y, sobre todo, inteligente para minimizar las virtudes del United, principalmente en el ataque.
El United fue el primero en avisar y meter miedo en el cuerpo al Barça, pero la calma se mantuvo incluso en la tormenta para que el plan siguiera y, poco a poco, el partido comenzara sonriendo para los catalanes, porque el choque fue uno antes del penalti con el que Robert Lewandowski puso el 0-1, tras una falta de Bruno Fernandes a Alejandro Balde en el área, y otro después.
Adelantarse tras el cuarto de hora fue un baño de tranquilidad para el Barça, porque pasaron a dominar casi sin oposición. Estaban presionando muy bien a los ‘Red Devils’, pero también supieron cómo responder a lo que intentaban proponer los locales. Consiguieron desesperarlos, minimizarlos. Y allí estuvo la clave para que mostraran una versión muy inferior a la que habían mostrado no solo en el Camp Nou, sino en todo este 2023.
En los minutos finales de la primera mitad fue cuando el Barça pudo merodear el área de De Gea, quien además del penalti poco había intervenido. Primero fueron centros de Koundé y De Jong, pero la más clara llegó justo antes del descanso cuando el guardameta español se hizo un lío despejando y Sergi Roberto cazó el balón. No estuvo fino en su remate y Kessié consiguió el rechace, pero Casemiro acabó resolviéndolo.
Lo que decíamos antes. Fueron dos partidos distintos, en su totalidad. Todo el mérito que el Barça había hecho en la primera mitad para estar por delante en el marcador y la eliminatoria, quedó en duda en el comienzo de la segunda parte, porque salieron dormidos ante un United que quería empatar sí o sí y al que le hizo efecto la entrada de Antony: A los dos minutos, los culés perdieron atrás, Bruno Fernandes vio a Fred que llegaba, cedió el balón y el brasileño definió con un disparo pegado al palo.
No fue la única que tuvo el United, porque se mostraron mucho más acertados ante un Barça que no salió de su letargo hasta pasada la hora de partido, cuando tuvieron dos ocasiones claras para ponerse por delante: Un cabezazo de Koundé que detuvo ‘in extremis’ De Gea y un disparo desde la frontal, de Kessié, que también rechazó el meta español.
Las ocasiones iban a cuentagotas, hasta que los de Erik ten Hag volvieron al ataque para, de cierto modo, terminar de matar a un Barça que estaba teniendo demasiados problemas para generar ocasiones de peligro. Entre Varane y Lisandro tenían muy controlado a Lewandowski y, sin eso, poco podían hacer. Antony, que ya había participado en el primer gol, fue el encargado de dar ventaja a los suyos: Tras dos rechaces en e área, el brasileño cazó el balón para poner una buena volea y así batir a Ter Stegen.
Barcelona: Marc André Ter Stegen; Jules Koundé, Ronald Araujo (Alonso, 82′), Andreas Christensen, Alejandro Balde; Sergio Busquets, Frenkie De Jong, Franck Kessié; Raphinha (Fati, 75′), Sergi Roberto (Torres, 70′), Robert Lewandowski. Gol: Lewandowski (18′).
Manchester United: David De Gea; Aaron Wan-Bissaka (, Raphael Varane, Lisandro Martínez, Luke Shaw; Casemiro, Fred, Bruno Fernandes; Jadon Sancho (Garnacho, 67′), Marcus Rashford (McTominay, 88′), Wout Weghorst (Antony, 46′). Goles: Fred (47′) y Antony (73′).
La clave para el Barcelona pasa por intentar replicar su gran momento en La Liga, donde es líder por ocho puntos sobre el Real Madrid, en un marco europeo que los ha visto quedar eliminados de la fase de grupos en las últimas dos Champions.
Para este compromiso Xavi tendrá bajas importantes como la ya conocida de Ousmane Dembelé, la de Pedri, quien se lesionó en el juego de ida, y la de Gavi, por tarjetas amarillas. Sin embargo, recuperará en el mediocampo al capitán Sergio Busquets.
El Manchester United tiene una gran oportunidad de demostrar que Old Trafford volvió a hacer esa gran fortaleza para enfrentar a los rivales cuando reciba al Barcelona. Los muchachos de Erik ten Hag solo han perdido dos de sus últimos 11 compromisos europeos en el Teatro de los sueños, ambos contra clubes españoles, y actualmente hilvanan 17 encuentros oficiales sin conocer la derrota en su feudo.
Noticia más que agradable para una afición que vio como los Diablos Rojos realizaron un gran compromiso en el Camp Nou y hasta incluso estuvieron ganando en algún momento del juego.
Para este compromiso ten Hag no podrá contar con Christian Eriksen, Mason Greenwood y Donny van de Beek, mientras que son duda Antony, Harry Maguire y Anthony Martial.
Barcelona vs. Manchester United se podrá ver a través de la señal de ESPN y Star Plus para toda Latinoamérica. La cadena televisiva llevará el choque a todos los hogares para disfrutar del inicio de las rondas decisivas de la Europa League entre dos equipo que quieren alcanzar la máxima gloria.
Recibe nuestro boletín de noticias: te enviaremos el mejor contenido deportivo, como siempre lo hace Depor.
Contenido GEC