Hace unos años, Neymar era considerado la gran esperanza del Paris Saint-Germain para ganar la primera Champions League de su historia. Hoy, representa un gran problema para la institución francesa del que quieren deshacerse en el próximo mercado de fichajes de verano. Fichado desde el FC Barcelona en 2017, por 222 millones de euros, el delantero brasileño ha pasado a ser un lastre para los altos mandos del club. No solo por su polémico comportamiento fuera del campo, también por su fragilidad física, la misma que ha terminado en una nueva lesión y que le hará perderse lo que queda de temporada.
Semejante situación ha hecho que la directiva del PSG tome una medida desesperada para sacarse de encima a Neymar. En Francia aseguran que el club parisino contempla la posibilidad de abonarle parte del salario correspondiente a los dos años de contrato que le restan para finiquitar su salida anticipada.
Para el PSG, la situación soñada sería vender al delantero brasileño, quien tiene contrato hasta el 2025, por 60 millones de euros. Sin embargo, al día de hoy, no existen clubes dispuestos a pujar por el jugador paulista y mucho menos a pagar el salario de 40 millones que percibe por temporada.
Así las cosas, en las oficinas del Parque de los Príncipes tendrían que rascarse el bolsillo para rescindir el contrato de Neymar. Si se dan las cosas, el delantero brasileño quedaría como agente libre, una situación extraña para un jugador de su calidad. Tocaría fondo.
Siempre según la prensa francesa, la salida de Neymar ayudaría al PSG a rebajar la masa salarial ante la llegada de las nuevas reglas del Fair Play Financiero.
El delantero brasileño fue intervenido en Catar de su lesión de ligamentos en el tobillo derecho, una operación que “se desarrolló muy bien”, anunció el París Saint-Germain. La cirugía tuvo lugar en la clínica ASPETR de Doha y estuvo a cargo de tres médicos, uno de ellos Rodrigo Lasmar, de la selección nacional brasileña, detalló el PSG en un comunicado.
“El jugador mantendrá a partir de ahora un protocolo de reposo y de cuidados”, añade la breve nota. Al anunciar que Neymar tenía que operarse, el pasado lunes, el PSG ya avanzó que su estrella brasileña tendría que estar entre tres y cuatro meses de baja, con lo que se perderá lo que resta de temporada.
Cabe recordar que el jugador más caro de la historia sufrió un fuerte esguince en su tobillo derecho (una articulación que se ha lesionado de forma repetida durante su carrera) durante un encuentro de liga el pasado 20 de febrero ante el Lille.
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