No entiende o no conoce el significado de la palabra consecuente. Un nuevo escándalo se suma a la agitada vida extradeportiva de Kyle Walker. El futbolista del Manchester City ha causado revuelo y sobre todo malestar en Inglaterra, luego de que se revelara que el jugador organizó una fiesta sexual con un amigo y dos prostitutas en plena cuarentena por el coronavirus. Pero lo que ha generado mayor molestia es que este encuentro lo tuvo justo un día antes de enviar un mensaje en el que animaba a quedarse en casa para evitar la propagación del COVID-19.
Así lo ha revelado el medio inglés ‘The Sun’, a través de una de las invitadas a la reunión, quien fue la que reveló la historia de la fiesta. Louise McNamara, de 21 años, y una brasileña de 24 años fueron las dos chicas que acudieron al apartamento del lateral derecho en Hale, Chesire.
Según el testimonio de Louise, llegó en taxi la noche del martes, tan solo unas horas antes de que Walker afirmara en una entrevista que todos debían quedarse confinados en casa.
“Kyle debería saber mejor qué hace. Primero está invitando a extraños a su casa para tener relaciones sexuales y al día siguiente da un discurso a todos sobre la necesidad de mantener el confinamiento. Es un hipócrita y pone a las personas en riesgo”, dijo Louise en The Sun.
En su relato agrega que le pagaron 2.500 euros antes de pasar a la habitación e incluso apunta a la marca de preservativos que uso Walker en la fiesta. La fiesta se prolongó hasta las 2 de la madrugada.
“Tenemos que pensar en la salud de otras personas y en proteger a los ancianos y los miembros de la familia que pueden propagarla. Quédese adentro, siga lavándose las manos, siga los protocolos y preste atención al NHS” (Servicio Nacional de Salud)", fue el mensaje que compartió el jugador inglés y que ha causado indignación.
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