Liverpool y Tottenham protagonizaron este domingo un espectacular duelo en Anfield y acabaron repartiéndose los puntos dos equipos que aspiran a clasificarse para la próxima Champions League. El hecho lamentable de la noche fue el penal con el que los de Pochetino empataron al final.
Cuando parecía que la victoria era de los 'Reds', el árbitro señaló otro penal a favor de los londinenses por una falta del holandés Virgil Van Dijk al argentino Erik Lamela. Harry Kane convertiría el tanto.
Al final del partido, Jurgen Klopp se mostró claramente furioso por el resultado. Los tres puntos estaban en sus manos luego de una gran jugada de Salah y un error arbitral se los quitaba.
El alemán reveló que "recibiría una de las mayores multas en la historia del fútbol" si expresara sus verdaderos sentimientos. Estaba claramente molesto cuando salió del campo de Anfield y su estado de ánimo no había cambiado cuando llegó al auditorio de la Press.
"No es penal". "Escuché que Lamela estaba fuera de juego con una pierna y se encontró con Virgil van Dijk. Virgil lo ve en el último momento, detiene el movimiento pero aún lo toca, Lamela ya está bajando. El árbitro dice que continúe y el juez de línea toma la decisión. Así fue. Eso es lo que todos vieron", explicó el exBorussia Dortmund.
"Obviamente no era su día. La primera penalización fue una de las situaciones más claras fuera de juego que he visto. A menos que haya una nueva regla. No sé exactamente", agregó.
Una semana más, la Premier League sigue liderada por el Mánchester City, que este fin de semana empató en su visita al Burnley (7º), con 69 puntos, 13 más que el Mánchester United, que el sábado derrotó por 2-0 al Huddersfield, en partido en el que el chileno Alexis Sánchez se estrenó como goleador en el United en su primer partido en Old Trafford.