Luego de haber salido libre en 2012, Paul Pogba regresa al Manchester United por la puerta grande. Estará al mando de José Mourinho y jugará con Zlatan Ibrahimovic en un equipo que promete ser la gran atracción de la Premier League inglesa en esta temporada.
"Creo que es mi destino", explicó el centrocampista francés en una entrevista difundida en la página web del club. "Es un gran desafió volver al lugar de donde me fui, allí donde crecí, donde empecé. No había terminado lo que había empezado, entonces creo que he vuelto para terminarlo", agregó.
Para Paul Pogba, el primer gran desafío será justamente controlar la presión que caerá sobre él luego de este traspaso astronómico. Aunque el volante ya está acostumbrado a estar en el centro de la espiral mediática: fue campeón del mundo de menos de 20 años en 2013, mejor jugador joven del Mundial 2014 en Brasil, cuádruple campeón de Italia con la Juventus y finalista de la Eurocopa 2016.
"Sólo pienso en el terreno", prometió Pogba. "Quiero cumplir las cosas y eso es todo. Es por esto que estoy aquí, para convertirme en uno de los mejores y ganar títulos", agregó.
"Este es el club adecuado para que logre todo lo que espero en el juego", indicó Pogba. "Siempre ha sido un club con un lugar especial en mi corazón y espero ansiosamente trabajar con José Mourinho", prosiguió el jugador francés.
Pogba, que pasó su vacaciones en Estados Unidos intentando evadirse del traspaso, señaló que "este traspaso llevó mucho tiempo porque se trataba de una enorme decisión e implicaba mucho que pensar y trabajo. La espera fue molesta para mí como lo fue para ustedes", explicó el crack francés.
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