Todos ellos son ya figuras consagradas en el fútbol mundial, pero a muchos les costó abrirse camino en sus respectivos clubes cuando daban sus primeros pasos. Incluso los que hoy son cracks tuvieron que quemar etapas, aunque, desde luego, algunas suplencias sorprenden más que otras.
Por ejemplo, Andrés Iniesta, ídolo del Barcelona, tuvo que esperar su oportunidad para demostrar toda su valía en el campo, pues en la temporada 2005-06 el titular en el mediocampo azulgrana era Mark van Bommel. El ‘Cerebro’ fue suplente, entre varios partidos, en la final de la Champions League de ese curso ante el Arsenal, ero su ingreso cambió todo.
Otro caso, y que tiene que ver con el fútbol peruano, es el de Robert Lewandowski. La figura del Bayern Munich, y antes del Borussia Dortmund, inició su carrera en el Lech Poznań de Polonia, donde tenía por delante nada menos que a Hernán Rengifo, titular por entonces entre el 2007 y 2009.
Pero no solo tuvo que ser suplente de Rengifo, también del propio Lucas Barrios, según reveló el martes el mismo delantero paraguayo. “Robert Lewandoski era mi suplente en el Borussia Dortmund de Jurgen Klopp”, contó el ahora atacante de Gimnasia de La Plata.
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