En Europa, este jueves 21 de diciembre, se marcó un hito que sacudió los cimientos del futbol mundial. El Tribunal Europeo de Justicia dio su aprobación para la creación de la Superliga Europea. Esto representa un fuerte golpe para la UEFA y la FIFA, los principales organismos que han mantenido una postura firme en contra de este torneo, liderado por el Real Madrid y el FC Barcelona. Sin embargo, no solo la máxima entidad europea de fútbol expresó su desaprobación, ya que varios equipos de la Premier League, encabezados por el Manchester United, y otros clubes de diferentes ligas, como el PSG, también han manifestado su rechazo hacia esta nueva competición.
Para entender mejor la situación, es importante tener en cuenta que la Superliga Europea de fútbol es un proyecto liderado por el Real Madrid y el Barcelona con la intención de establecer una nueva competición continental de alto nivel que no esté vinculada a la Champions League y que excluye la participación de la UEFA y la FIFA.
En 2021, Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus, AC Milán, Inter, Liverpool, Manchester United, Manchester City, Arsenal, Tottenham y Chelsea expresaron su respaldo a la formación de dicha competición. No obstante, en respuesta al anuncio de la Superliga, la UEFA y la FIFA adoptaron una postura de oposición activa.
Las dos organizaciones amenazaron con imponer penalizaciones económicas a los clubes que formen parte del proyecto, lo que resultó en la retirada de varios equipos. Al final, solo el Barça y el Madrid permanecieron en la iniciativa, y recurrieron a los tribunales en un esfuerzo por evitar sanciones. Como resultado, el Tribunal Europeo emitió un fallo favorable a los dos cuadros españoles.
Por lo tanto, la máxima autoridad administrativa de justicia de la Unión Europea (UE) determinó que estos dos entes de fútbol ejercieron un abuso de “posición dominante” en su actuación hacia el controvertido torneo y señaló que las penalizaciones que podrían aplicar a los clubes que participen en esta competición “son ilegales”.
La UEFA, la FIFA y varios equipos europeos argumentan que la Superliga propone un formato “egoísta y elitista” debido a que no se basa en un sistema completamente abierto, lo que significa que la clasificación de los equipos no dependerá de su desempeño en las competiciones nacionales europeas, lo que pondría en duda la meritocracia en la competición.
“Alemania, Francia, Inglaterra, Italia, España (a excepción del Real Madrid y Barcelona), etc. no quieren la Superliga. Estamos a favor de proteger a la gran familia del fútbol europeo, de proteger las ligas domésticas y de que a través de ellas se consiga la clasificación para las competiciones europeas en el terreno de juego cada temporada”, señaló el Atlético Madrid por medio de un comunicado.
Por otro lado, el PSG y el Bayern de Múnich, que desde el principio mostraron su desacuerdo con esta supuesta competición, expresaron que el modelo en el que se fundamenta prioriza los intereses individuales de unos pocos clubes en un momento en el que la sociedad demanda más que nunca solidaridad.
La Superliga en el fútbol europeo sigue generando consecuencias a nivel global, con varios equipos de Alemania, Francia, Italia e Inglaterra expresando su oposición a este proyecto. En particular, la Premier League ha enviado un mensaje enfático en contra de esta iniciativa.
“El fallo no respalda la Superliga, la Premier League continúa rechazando tal concepto. Los aficionados son de vital importancia para el fútbol y una y otra vez han dejado claro su oposición a una competición “separada” que corta el vínculo entre el fútbol nacional y el europeo”, señaló el comunicado de la Premier.
En el mismo sentido, el Manchester United se expresó de manera más directa y personal, afirmando: “Nuestra posición no ha cambiado. Estamos completamente comprometidos con la participación en las competiciones de la UEFA y en cooperar con la UEFA, la Premier League y el resto de clubes de la ECA para el desarrollo del fútbol europeo”.
Además, varias organizaciones y equipos, incluyendo LaLiga de España, Atlético, Betis, Mallorca, Osasuna, Roma, la Asociación de Clubes Europeos, Bayern Múnich, PSG y el sindicato internacional de futbolistas liderado por FIFPRO, se sumaron a la postura de oposición.
A través de sus redes sociales, la organización de la Superliga Europea anunció el formato que tendrá el torneo, el cual estará conformado por 64 equipos. Eso sí, existirán tres divisiones (Star, Gold y Blue), contando con ascensos y descensos en todas las categorías.
Asimismo, está previsto que se jueguen 14 partidos por club, siete en casa y siete en condición de visita. Ojo, esta será una competición abierta, la misma que tendrá dos fases: Liga y Eliminatoria.
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