Antonio Conte vivió una noche para el olvido. A pesar de que el Inter de Milan arrancó ganando la final de la Europa League ante Sevilla, terminó cayendo con autogol de su goleador Romelu Lukaku. El DT milanista solo tuvo que soportar la derrota de su equipo, sino también una broma de Éver Banega, quien se burló del del injerto capilar que se sometió para combatir la calvicie.
El altercado se produjo a los 15 minutos del compromiso disputado en el estadio Rhein Energie, cuando se encontraba empatado 1-1 por el adelanto de Romelu Lukaku a favor de los italianos y la primera anotación de Luuk de Jong para los andaluces.
Conte se dirigió a Banega en medio de los reclamos por una supuesta mano de Diego Carlos y el volante de Sevilla sacó de sus casillas al técnico del Inter tras llevarse la mano al cabello, recordando públicamente que el actual entrenador terminó su carrera como jugador con la cabeza despoblada.
El conductor del conjunto milanés cayó en las provocaciones y tuvo que ser controlado por sus asistentes mientras el exjugador de la selección argentina también era detenido. “Te espero afuera después”, señaló el DT en señal de amenaza, informó el diario La Gazzetta dello Sport. Luego Conte fue amonestado.
“Fue muy bueno entrenar al Inter”, “todo tiene un límite” y “no doy marcha atrás” fueron algunas de las palabras del DT italiano luego del 3-2 conseguido por Sevilla en la final de la Europa League, que sugirieron su posible adiós al equipo milanés.
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