Compartió cancha y vestuarios con jugadores que tenía pegado en su álbum como César Cueto, Teófilo Cubillas y Hugo Sotil en Alianza Lima. Fue bicampeón nacional en el ‘equipo del pueblo’ en los años 1977 y 1978. Como futbolista era un rústico defensa que le pegaba a todo lo que se movía y rechazaba las pelotas aéreas de ‘chalaca’, apodo que le puso el ‘Poeta’. Hablamos de César Gonzales Hurtado, el padre futbolístico de Carlos ‘Kukín’ Flores y descubridor de Juan Manuel Vargas, quien fue el nuevo invitado en ‘Los Titulares de Puchungo’ a través de Depor. El formador de menores repasó su corta hoja de vida futbolística, se retiró a los veintisiete años, las siete veces que salvó del descenso a su querido Sport Boys como entrenador. Además, se dio el gusto de jugar y salir campeón nacional junto a Pedrito Ruiz en Sporting Cristal del año 1983. Recordó anécdotas, vivencias futbolísticas y a su maestro como técnico: Roberto Chale.
¿Cómo se inició su primer capítulo en el fútbol profesional?
Yo jugaba en inter barrios La Prensa en San Marcos, y estudiaba psicología en la Universidad Garcilaso, pero en una de esas Zacarías, en paz descanse, me llamó para una selección con jugadores amateur. Recuerda que el Gobierno y el IPD querían que sean amateur, fui capitán de la selección peruana del 75, fue capitán del 77 con Marcos Calderón, y ahí conocí a Maradona. Jugamos contra él.
¿Una anécdota?
Le metí la yuca a Maradona. Le metí dieciocho faltas, no pude quitarle la pelota nunca. Era un fenómeno a los dieciséis años de edad. Lo agarrábamos en posta. Era la táctica de Marcos Calderón. Después nos quitaron el habla los argentinos, el 77.
Tuvo sus años de gloria en Alianza Lima...
Por Javier Castillo, el 77 y 78 campeón. El 79 fui a Venezuela, corto tiempo, por mis documentos. El 82 me fui a Sporting Cristal, el 83 fui campeón. Son mis inicios. A la vez ya nacía como técnico, lo era en el Claretiano, en el colegio.
¿Por qué se retiro joven?
A los 27 años. Mi carrera tenía un límite, y me dediqué al colegio, ya llevo 45 años. El fútbol fue un apoyo para mi carrera. Tengo mil anécdotas. Tenía adelante a Chumpitaz, Manzo, Duarte, Meléndez, una estrella de jugadores. Ya sabía que no podía jugar, me dediqué a ser entrenador, también como Jefe de deportes del colegio. Nunca en mi vida me lesioné. Yo dejé el fútbol por tres motivos: nació mi tercer hijo. Yo no podía vivir del fútbol toda la vida, tenía que estudiar. Yo no iba a jugar. Mis padres me exigieron estudiar. Me retiré con 27 años y con tres hijos. Sentía que había nacido para dirigir menores. Fui técnico de la Sub 20 de Carlos Zegarra, Paolo Maldonado, Kanko Rodríguez, Carlos Basombrío, a los 39 años era entrenador de la selección. Además, viajé a todas las partes del mundo para estudiar.
Se codeó con grandes cracks en Alianza Lima...
Yo coleccionaba a todos en el álbum Navarrete. Ahí tenía a los cracks, los pegaba a César Cueto, ‘Cholo’ Sotil, Baylón, Cubillas, ‘Pitín’, y al año siguiente, me ve jugar Zacarías y me llevó. Yo metía patadas. Sacaba la pelota de chalaca, por eso me pusieron esa chapa. Llegué a jugar con esos monstruos en Alianza y fui titular, en el año 77. Me gané mi puesto, la amistad con Cueto me ayudó mucho. Era malcriado, tenía un carácter jodido. Después, me fui a Venezuela, el año 79, era chiquillo. Yo he sido jugador con más suerte en el fútbol, he sido malo, solo metía yuca, pero tuve la oportunidad de jugar con Pedrito Ruíz en Cristal, con ‘Panadero’ Díaz, Chumpitaz, Quiroga, Quesada. No sabía cómo era titular, pero el juego aéreo era impresionante.
¿Quién le puso el apodo de ‘Chalaca’?
Me lo puso Cueto. Es mi hermano del alma. Yo he jugado con Julio César Uribe, tengo una lista grande de todos los que he jugado. He jugado con Abel Lobatón. Cueto me daba pelota alta, y lo hacía para que yo me tire de chalaca, y se mataba de risa. Yo sacaba de chalaca, y César se tiraba al suelo a reírse. Hay muchos que se olviden que Cueto trabajó conmigo en la selección juvenil que sacamos a Farfán y Guerrero. Cueto fue mi ayudante técnico en los noventa. Nadie se acuerda de eso. Aconsejaba a los chicos nuevos.
Te iniciaste como asistente técnico con Roberto Chale en Defensor Lima. ¿Cómo así?
Sí, me invitó a trabajar con él como asistente técnico. A raíz de eso, cada uno tomó su rumbo. Fue al Sport Boys, nos separamos, pero Chale siempre fue mi maestro, mi guía. Mi descubridor como técnico. Me dio la oportunidad que sea su asistente técnico y preparador físico.
¿Cómo era Chale?
Un tipo que sabía ver el fútbol, pero yo entrenaba dentro del campo, era mi especialidad. Tenía mucha visión práctica del fútbol. Cuando perdíamos, nos hacía correr hasta Regatas Lima, ida y vuelta, por empatar con cualquier equipo. Teníamos a ‘Colibrí' Rodríguez, Julinho. Después, en el 82, fundé la Academia Cantolao con Kiko Mandriotti.
¿Qué recuerdos de infancia con Carlos ‘Kukín’ Flores?
Desde los ocho años lo saqué del Cantolao y llevé al Boys. Después llegó Jorge Espejo, también saqué a Farfán con catorce años, Rodríguez. Tengo anécdotas con ‘Puchungo’. Un día lo cambié en el Boys, y se molestó. Salió jetón. Lo mandé a entrenar con los juveniles. Después regresó, hicimos las paces y se fue a jugar a Arabia. Le pegaba a ‘Kukín’, era su padre. Lo saqué de Iquitos cuando estaba en una casa de reposo. Me salvó la baja. Saqué a bastantes chicos, la generación del año 84. Donny Neyra, Diego Penny, Yuyo Libman, el ‘Mudo’, Farfán, Guerrero, Gonzales Vigil, todos se fueron a Europa, los del año 84. Catorce fueron Europa. Yo no necesité hacer micro ciclos. Viaja por todo el Perú haciendo prácticas. Así yo traje a Paolo Maldonado, lo traje de Mollendo. Lo hice entrar a la ‘U’ con el ‘Gato’ Cuéllar. Todos me adoran y quieren una barbaridad.
El ‘Loco’ Vargas fue un caso único...
Fue un hallazgo. No fue como Farfán o Paolo, a quiénes ya lo veía desde los catorce años y sabías que iba a jugar bien. Este era un hijo de la gran...no sé quién es peor, ‘Kukín’ o el ‘Loco’. Lo encontré jugando futbolito. Me invitaron a jugar en el Regatas. Voy y estaba con su mancha de peloteros. Limpiaba carros en el mercado de Magdalena. Lo vi hacer dos jugadas, y lo llamé a la selección peruana para que se pruebe. Fue y los agarró a tabas a todos, a Farfán, a Paolo, y se quedó para toda la vida. Vargas sabe que yo lo quiero mucho, pero es incapaz de una llamada por el día del padre, del técnico, igual que el ‘Mudo’.
También tuvo al ‘Zorrito’ Aguirre...
Claro, lo traigo de Pisco. No apareció solo. Para verlo jugar a Farfán tuve que ir a verlo al club Okinawense. Todos los jugadores de la 84 siguen en vigencia, los Guerrero, Libman, Cruzado.
¿Cuántas veces salvó al Sport Boys del descenso?
Siete veces. Hice dos buenas campañas, la del 98 y 99. También la del año 93. Las otras veces salvé de la baja. Me lo daban con baja. Parece que me hice famoso por eso más que por mis dotes de buen técnico. Yo soy de pueblo, nada con los argentinos ni uruguayos.
Hoy en día continúa en la formación de menores...
Sí, ya son cuarenta y cinco años. Veo a los chicos como van progresando cada año, los veo desde los diez años hasta los diecisiete. Estoy en lo más fuerte lo que es colegio. ‘Chalaca’ no está desactualizado, estoy más actualizado que todos. Estoy entero.
Recibe nuestro boletín de noticias: te enviaremos el mejor contenido deportivo, como siempre lo hace Depor.
TE PUEDE INTERESAR
- Convocados de Perú: jugadores de la Liga 1 llamados por Juan Reynoso
- Juan Reynoso: convocatoria con jugadores de Liga 1, el presente de Guerrero y el reto ante Chile
- ‘Chalaca’ Gonzales: “Si Reynoso va a convocar a un nacionalizado que sea Ignacio da Silva”
- Con Cueva de titular y Reyna por Zanelatto: la pizarra de Larriera ante Binacional