Si bien es cierto que la tradición más conocida es el Día de Muertos, sin embargo hay una celebración que también es muy importante para todas las personas en México y se realiza el 1 de noviembre. En esta nota, te contamos todos los detalles de qué se lleva a cabo este día y por qué es tan especial para todos los mexicanos. Aquí te contamos de qué trata. Sigue leyendo.
Una celebración que lleva miles de años existiendo es una que tiene lugar todos los 1 de noviembre, el Día de Todos los Santos. Esta fecha generalmente es feriado en muchos países ya que por tradición cristiana se homenajea a todos los santos.
La festividad se conmemora desde el año 835, cuando el papa Gregorio IV la estableció en el calendario, después de que el papa Gregorio III consagrara una capilla en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, en honor a todos los santos.
Este evento fue especialmente eligido para celebrarse el 1 de noviembre ya que coincidía con la celebración pagana del “Samhain” o Año Nuevo Celta, actualmente conocido como Halloween o Noche de Brujas, que se celebra la noche del 31 de octubre. Y en aquella época, el objetivo de la Iglesia era ir eliminando las fiestas paganas del calendario. Debido a esto es porque se establece esta fecha.
El Día de Todos los Santos, en México, se recuerda a los pequeños que murieron. Durante este día se pone el altar y las ofrendas para los niños que ya no están con nosotros. Este día es muy especial también porque es la puerta a uno de los festejos emblemas de México, el Día de Muertos. Durante esta noche, las personas acuden a rezar a los panteones, donde pasan toda la noche, y al terminar, degustan todos los platillos y bebidas que fueron ofrecidos como ofrenda a la persona fallecida.
Como ya vimos, esta tradición tiene sus raíces en la religión cristiana. Por ende, durante el Día de Todos los Santos las catedrales exhiben las reliquias de los santos que hay entre sus muros para que los fieles puedan acudir a contemplarlos y rendirles culto. Sin embargo, en el ámbito familiar y personal, en tanto, muchas personas que tienen por costumbre acudir en el Día de Todos los Santos a los cementerios, donde se llevan flores a los difuntos y se arreglan las tumbas, nichos o panteones. En algunos lugares ponen velas en las tumbas durante la noche que va del 31 de octubre al 1 de noviembre, durante la conocida como la Noche de Todos los Santos.
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