Sergio Pérez, piloto de Red Bull Racing, se pronunció después de un complicado Gran Premio de Japón en el que las dificultades experimentadas desde el viernes continuaron durante la sesión del domingo, lo que finalmente lo dejó fuera de la competencia después de una serie de incidentes en la primera mitad de la carrera (tuvo que abandonar en la vuelta 15).
Desde el inicio de la carrera, Pérez se vio sometido a presión por parte del Ferrari de Carlos Sainz, lo que llevó a un contacto entre ambos vehículos. Este contacto resultó en un choque con el Mercedes de Lewis Hamilton, causando daños en el alerón delantero del coche de Pérez. Ante esta situación, el equipo Red Bull decidió llamar al mexicano a los pits de inmediato para cambiar la pieza dañada.
Checo describió la complicada arrancada, mencionando problemas de tracción debido al enfriamiento de los neumáticos. También explicó cómo quedó atrapado entre Sainz y Hamilton en la primera curva, lo que contribuyó a los desafíos iniciales en la carrera.
A pesar de los problemas iniciales, Checo Pérez mostró su determinación y comenzó a avanzar en la clasificación, acercándose a la zona de puntos. Su rival en ese momento era el piloto del Haas, Kevin Magnussen. Sin embargo, cuando Pérez intentó adelantar a Magnussen por el interior, se produjo un contacto entre ambos, lo que resultó en un trompo para el piloto danés y daños en el coche de Pérez. Este incidente complicó aún más su carrera y obligó al equipo a retirar el vehículo de la competición.
El piloto mexicano asumió la responsabilidad por el contacto con Magnussen, calificándolo como un error propio y lamentando la consecuencia. Sin embargo, Pérez regresó a la pista después de bajarse del coche, siguiendo una estrategia de Red Bull para acumular las vueltas mínimas requeridas para clasificar en la carrera y, al mismo tiempo, evitar sanciones adicionales por el incidente con el danés.
Pérez había recibido previamente una penalización de cinco segundos por no respetar el proceso de aceleración durante un período de safety car al inicio de la carrera.
Mientras Pérez observaba la carrera desde los boxes, Red Bull lograba su sexto campeonato de constructores gracias a la victoria de Max Verstappen. Pérez expresó su felicidad por el éxito del equipo, aunque reconoció que el día no había sido tan favorable para él personalmente.
En resumen, el Gran Premio de Japón resultó ser un desafío considerable para Sergio Pérez, con múltiples incidentes y desafíos que afectaron su desempeño en la pista.
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