El cantante mexicano Luis Miguel también conocido como “El sol” de México, tuvo la oportunidad de conocer a la princesa Estefanía de Mónaco cuando transcurría el año 1991. Esto ocurrió en el marco de las celebraciones del Festival Acapulco, donde únicamente los que pisaban ese escenario tenían una proyección indiscutible sobre toda América Latina.
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Este festival era celebrado desde inicios de los años 90 y estaba a cargo de la cadena televisiva Televisa y Raúl Velasco y era donde se reunían a todos los talentos de la música nacional y también de rostros de artistas internacionales que recién se hacían conocidos.
A Luis Miguel le tocó pisar ese escenario donde se presentó en reiteradas ocasiones y era considerado como el mayor foco de atención para el público y los medios de comunicación de todo el mundo.
Esto le ayudó a desenvolverse más y conocer a chicas quienes también acudían al lugar para participar. Fue así que no perdía oportunidad para coquetear con cualquier mujer que le pareciera atractiva.
Fue en ese festival cuando el cantante se encontraba despegando en su carrera musical que no dudó en acercarse a la hija menor de los príncipes Raniero III y Grace de Mónaco (Grace Kelly), perteneciente a la Casa Real Grimaldi.
Esto se produjo durante el evento musical cuando Raúl Velasco decidió invitar a cantar en el escenario a la Princesa Estefanía de Mónaco quien por aquella época tenía 26 años cumplidos, mientras que “El sol” apenas tenía 21.
Aquel día la princesa Estefanía subió al escenario para presentar canciones de su álbum ‘Stéphanie’, el cual fue estrenado ese año luego de haber sido grabado en Los Ángeles (Estados Unidos).
En el escenario la princesa cantó “Ouragan”, entre otros temas como “Flash” y “Young Ones Everywhere”, los cuales dejaron impactado a “El sol de México”.
Cuando Luis Miguel subió al al escenario para colocarle la medalla del festival a la princesa Estefanía de Mónaco, aprovechó la situación para robarle unos cuantos besos.
Aprovechando su estadía en México, Estefanía acudió esa noche a una fiesta de Acapulco para divertirse la cual se realizaba en la discoteca “Baby ‘O”, donde no pudo entrar debido a que le indicaron que no llevaba la ropa adecuada.
No obstante, Luis Miguel se enteró de ese hecho y llamó al gerente de lugar para reclamarle lo sucedido. A la noche siguiente la princesa acudió junto a Luis Miguel y entraron a la discoteca.
Además los acompañaron Jorge “El Burro” Van Rankin y Alemán Magnani, donde olvidaron el mal momento que atravesó la princesa.
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