Si viste alguna película de Harry Potter o cualquier otra cinta o serie sobre hechizos, sabes muy bien qué es una varita mágica. Bueno, hoy te cuento que en la imagen que acompaña la nota hay bastantes. Tú tienes que elegir una para que salgan a la luz rasgos ocultos de tu personalidad. ¡Sí, este es un test visual muy interesante!
¿Debes tomar una decisión rápidamente? No. No es necesario que te apresures. Puedes escoger con calma. De hecho, es mejor que lo hagas así, ya que es fundamental que selecciones la varita mágica que más te agrade o llame la atención. Cualquier otra no te permitirá recibir la información precisa sobre ti.
¿Cuántas varitas mágicas hay en la imagen? Cinco. Claramente, ninguna se parece a las que se vieron en Harry Potter. Solo te lo comento para que sepas que me di cuenta de ello. Cuando ya tengas en mente tu decisión, anda a la sección de resultados de la prueba. Estos te dejarán boquiabierto(a), a pesar de no tener validez científica.
Si elegiste esta varita mágica, cuando las cosas van mal, experimentas un alto nivel de ansiedad. Valoras mucho la paz, la tranquilidad y la armonía. Consideras que no hay nada más importante que el equilibrio.
Si escogiste esta varita mágica, planificas cuidadosamente todo lo que harás durante el día. Organizas todo. Tu lema es que hay un lugar para cada cosa.
Si elegiste esta varita mágica, te encanta la emoción. Ves al mundo como una fuente constante de alegría y energía. Siempre buscas nuevas aventuras. Odias el aburrimiento y la monotonía. Te encanta la libertad.
Si escogiste esta varita mágica, eres una persona sensible, cálida y honesta. A menudo te pones en el lugar del otro. Posees un corazón de oro y un gran deseo por ayudar a los demás.
Si elegiste esta varita mágica, eres alguien que se fija metas y luego te esfuerzas para lograrlas. Eres una persona orgullosa de su trabajo. Muchos pueden llegar a pensar que eres adicto(a) a tu empleo.
Para responder esta interrogante, te comento que en la página web de Canal Salud IMQ se indica que “el desarrollo de la personalidad se inicia desde que nacemos, aunque es en la adolescencia cuando comienzan a sentarse las bases que nos definirán mentalmente. La búsqueda de nuestra propia identidad requiere de exploración, pensamiento crítico y confianza en uno mismo”.
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