Brasil designó a Thiago Silva como capitán para el partido del viernes contra Costa Rica por el Grupo E del Mundial Rusia 2018, en una continuación de su política de rotar el liderazgo del equipo.
El defensor del Paris St Germain llevó por última vez el brazalete en junio pasado durante una derrota 1-0 ante Argentina. Esa derrota amistosa en Australia fue la única sufrida por el entrenador Tite en 22 juegos.
Brasil empató su debut con Suiza y ahora enfrenta a Costa Rica, que por su parte perdió su primer partido 1-0 ante Serbia en San Petersburgo.
Ante Suiza, se vio a un todavía limitado 'Ney' que abusó de las jugadas individuales y acabó cojeando después de llevarse un récord de diez faltas de la defensa helvética.
Pero el susto aún sería mayor cuando, tras reaparecer de buen humor en el entrenamiento del martes, tuvo que marcharse antes de tiempo y de nuevo rengueando. El aire se cortó entonces en Sochi, con la lesión en el pie derecho que le tuvo tres meses parado aún muy reciente.
Los médicos se apresuraron a subrayar que los dolores no tenían nada que ver con aquello -ahora la zona molesta es el tobillo-, y el jugador más caro de la historia volvió a entrenarse el miércoles con normalidad.