Se acerca el día D. El Gobierno argentino definirá este viernes cuál será el futuro del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), que viene pagando a las familias más vulnerables desde que se inició la cuarentena por el nuevo coronavirus (COVID-19). El Estado decidirá si se establece un nuevo pago del bono de 10.000 pesos o se continúa con el mismo método de apoyo económico.
Según señala el diario argentino de economía y negocios Buenos Aires Económico, tras conversar con fuentes oficiales, “la ventaja del IFE es que ya está implementado”; sin embargo, la discusión que existe en el Gobierno gira en torno a seguir en un “IFE modificado”, aunque esto genere ciertos riesgos. La resolución se tomará en una reunión en la que participarán el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; su vice, Cecilia Todesca; los ministros Martín Guzmán y Claudio Moroni y el titular de la Anses, Alejandro Vanoli.
El Ingreso Familiar de Emergencia es un asignación excepcional resuelta por el Estado destinada a los trabajadores informales, de casas particulares, monotributistas sociales, y monotributistas de las categorías A y B. Cabe resaltar que la Anses lo había anunciado como un cobro de bono de 10.000 por única vez en el mes de abril.
Desde el 21 de abril unos 7.8 millones de personas comenzaron a cobrar la ayuda en sus cuentas bancarias, lo que implica para el Estado unos 80.000 millones de pesos. La cifras de los anotados para recibir los 10.000 pesos argentinos superó la cantidad inicialmente estimado por el Gobierno.
En cuanto a los extra para los jubilados o los benficiarios de la Asignación Universal por Hijo tampoco habrá otro desembolso extra. “Por ahora no está previsto”, aseguraron a BAE las mismas fuentes oficiales. Junto a los habares de abril, los jubilados cobraron un bono extraordinario por única vez de 3.000 pesos.
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