El accidente de Chenobyl de 1986 dejó la zona completamente inhabitable. Hasta el día de hoy es un sitio demasiado peligroso para vivir e incluso visitar, ya que los niveles de radiación aún son demasiado grandes en la atmósfera.
Sin embargo, así como los turistas que desean ver la ciudad, otras personas arriesgan sus vidas para captar el momento preciso en el que la ciudad volverá de sus cenizas y será habitable de nuevo. Este es el caso de David McMillan.
Junto a un científico que siempre lo acompaña en sus expediciones, este fotógrafo ha visitado la zona peligrosa de Chernobyl desde 1994 en de 22 ocasiones, tomando fotos del mismo ángulo para descubrir qué tanto ha cambiado la ciudad en 33 años.
Los resultados son increíbles. A pesar de que algunas estructuras se desploman por la radiación y el tiempo, la naturaleza ha ido ganando territorio en Chernobyl y se ha convertido en el nuevo habitante de la zona. pueden ver su galería pública en este enlace.