América Latina fue una de las últimas regiones en las que brotó el coronavirus durante esta pandemia, y también fue una de las que tuvo más conciencia social y médica (sobre todo en algunos países que fueron ejemplo), por lo que el número de contagios y decesos es considerablemente bajo.
A pesar de ello, según reportes antes de este fin de semana, la región pasó el umbral de los 10.000 contagiados por el Covid-19, llegando hasta los 10.435 casos (hasta este viernes) y 223 muertos (que irán aumentando conforme pasen los días).
Pero, a pesar de que las cifras son ‘bajas’ en comparación con regiones más afectadas como el epicentro de la pandemia (Asia) o la zona más afectada (Europa), la curva del temor aún no se ha quebrado, por eso es que los distintos mandatarios están tomando medidas para continuar con el aislamiento.
Hasta este viernes, los países con mayor cantidad de infectados son Brasil, con 2.915, de los cuales murieron 77; Ecuador, con 1.403 y 34 decesos; Chile, con 1.306 y 34 muertes; y Argentina, con 589 y 13 fallecidos.
El primer paciente en la región se reportó el 26 de febrero en Brasil. Las autoridades sanitarias de la nación más poblada de América Latina, con 210 millones de habitantes, proyectan un gran aumento de casos a partir de abril.
En los últimos días, los países latinoamericanos han seguido reforzando las medidas para afrontar la pandemia, con órdenes de confinamiento obligatorio en países como Argentina, Bolivia, Venezuela, Colombia, Panamá o El Salvador, toques de queda prolongados en Chile, Honduras, Perú y Guatemala, además de cierres cierres de fronteras casi generalizados.
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