En situaciones complicadas, medidas extremas. De acuerdo al último reporte dado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, México registra 1,378 casos confirmados de coronavirus, lo que ha puesto en estado de alarma a más de un estado dentro del territorio mexicano, llegando -incluso- a declarar Ley Seca en tres de estos.
Y es que las autoridades de los estados de Nuevo León, Campeche y Tabasco han decretado la suspensión de la producción, distribución y venta de bebidas alcohólicas, como parte de las medidas de prevención contra el COVID-19.
El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez, anunció la suspensión de la producción de bebidas alcohólicas a partir del viernes 3 de abril. La autoridad mexicana, conocido como ‘El Bronco’, calificó a esta actividad como “no esencial” por lo que fue suspendido, así como otros sectores económicos, en medio de la emergencia sanitaria nacional.
“Para qué ir ahorita [a comprar] y causar un problema, alguien puede estar contagiado ya en la calle, ustedes ponen el riesgo. Se van a ir con el [paquete de] seis [cervezas], pero contagiados a su casa y van a contagiar a sus hijos”, advirtió el gobernador.
La propagación del coronavirus en todo México ha hecho que su presidente, Andrés Manuel López Obrador, declare la emergencia sanitaria en todo el país. Esto impulsó que la población salga a las tiendas y supermercado para abastecerse, en especial, de alcohol, ya que se corrió el rumor de una posible ley seca en todo el país.
De momento, el Gobierno ha puesto en marcha, desde el lunes 23 de marzo, un plan de cuatro semanas para contener el COVID-19, con el reto de suspender actividades no esenciales en un país con 52 millones de pobres y más de la mitad de los trabajadores en la informalidad.
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