Una cápsula del tiempo. Esa fue la conclusión a la que llegaron los protagonistas de una historia que causó sensación en Facebook al inspeccionar un bolso hallado oculto en una de las paredes de un centro educativo de Ohio, Estados Unidos. ¿Qué era lo que contenía? Averígualo en la siguiente nota.
La cartera de color rojo cubierta de polvo fue descubierta el año pasado por Chas Pyle, un custodio de la escuela intermedia North Canton cuando volvía a colocar el borde entre los casilleros de los estudiantes y una pared de concreto. En su página de Facebook, el distrito escolar de North Canton publicó imágenes del objeto perdido hace mucho tiempo, en un intento de encontrar a su propietaria.
Al final descubrieron que pertenecía a una antigua estudiante llamada Patti Rumfola, que lo perdió en 1957. Lamentablemente, ésta falleció en 2013 pero los encargados del colegio pudieron contactar a sus hijos. “Los cinco hijos de Patti se juntaron en otoño pasado cuando abrieron el bolso y dieron un vistazo a la vida de su madre como adolescente en la secundaria Hoover”, informó la escuela en su publicación de Facebook.
Pero, ¿qué era lo que contenía? A través de las redes sociales, la escuela mostró cómo era la vida de una adolescente estadounidense en la década de 1950. Como muchas mujeres de esa época, Rumfola cargaba un peine, algo de maquillaje, polvos cosméticos y lápiz de labios en tono “rosa pastel”. Además, llevaba consigo varias tarjetas de membresía de la biblioteca pública, el centro juvenil y la Cruz Roja Juvenil Norteamericana.
También tenía varias fotos en blanco y negro de quienes parecían ser sus familiares y amigos, así como de un perro, que datan de hace más de 70 años. “Patti. Buena suerte a una maravillosa chica y amiga. Bonnie”, era el mensaje que se leía en una de las fotografías halladas en el bolso, firmada con cariño por una compañera de Rumfola con la que quizá mantuvo una amistad por años.
Y como el fútbol americano es uno de los deportes favoritos de los estadounidenses, Rumfola tenía también un calendario de los partidos que disputaría el equipo de su escuela en 1956, marcando las fechas de algunos encuentros. Junto a todo esto, el bolso contenía 26 centavos en monedas, que fueron repartidos entre sus cinco hijos y que aseguraron “conservarán como una recuerdo especial de lo que ella fue en vida”.
Rumfola se graduó del distrito escolar de North Canton en 1960 y estudió para convertirse en maestro. Se casó con John G. Michele en 1980 y la precedió en su muerte, según reseña su obituario. Sin duda, un tremendo viaje al pasado que nos enseña que hubo una época en el que la gente almacenaba información de la forma más literal posible y no como ahora que lo pueden hacer en dispositivos al alcance de su mano.
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