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Kim Kardashian y Kanye West están en el ojo de la tormenta tras los fuertes rumores que señalan que estarían a un paso del divorcio. Las especulaciones crecen día a día y más aún luego que se conociera que la empresaria ya habría contratado a la abogada Lausa Wasser para que se encargue de su defensa.
Sin embargo aún parece haber una pequeña luz de esperanza para que sigan juntos y es que según ha revelado una fuente al portal E! News, la socialité y su esposo están “tratando de solucionar las cosas” y para ello habrían recurrido a la terapia de pareja.
El informante explicó al citado medio que “se ha hablado del divorcio, pero Kim quiere más que nada que su relación funcione” y sobre lo que la llevó a tomar la decisión de divorciarse del rapero, manifestó que “no sucedió nada específico que los haya llevado a este punto”.
Sobre la posibilidad de una infidelidad o de que haya un tercero en medio de los famosos, otra fuente reveló al portal Today.com que “no hay nadie más involucrado” y precisó que la celebridad de televisión y el músico han estado lidiando con “problemas de relaciones” regularmente.
Ello no es una novedad pues en julio pasado, mientras atravesaba por un supuesto episodio del trastorno bipolar que padece, Kanye West reveló detalles privados de su familia durante el primer mitin que ofreció como aspirante a la presidencia de Estados Unidos en Carolina del Norte.
En dicho evento, al ser preguntado sobre el aborto, West se puso a llorar al recordar cómo su padre quiso interrumpir el embarazo de su madre y dijo que pensó en hacer lo mismo cuando Kardashian quedó embarazada de su primogénita.
Eso no fue todo, pues durante dos días más escribió en su cuenta de Twitter decenas de mensajes que luego borró, en los que decía -entre otras cosas- que Kardashian había intentado “encerrarlo” con médicos y, finalmente, que estaba intentando divorciarse de ella.
Tras ello, el rapero salió al frente para pedirle disculpas a su esposa, quien luego fue captada llorando mientras discutía con él dentro de un auto en Wyoming, y cuyas fotografías fueron divulgadas por el portal TMZ, dejando en evidencia que las cosas entre ellos no andaban bien.
Ya para agosto, Kim Kardashian y Kanye West decidieron dejar atrás esta polémica situación y viajaron a una isla tropical del Caribe para darse un respiro, tratar de salvar su matrimonio y desaparecer del radar de la prensa estadounidense que por esos días los acosaba. A pesar que después las cosas parecían haberse solucionado, todos los esfuerzos de la pareja no habrían sido suficiente para rescatar su relación.
