La protección de las contraseñas es esencial. Cada vez los sistemas nos piden condiciones como caracteres especiales y números, ¿pero qué tal sería usar emojis? Según el estudio “Huellas Digitales” de la compañía especializada en ciberseguridad Kaspersky, el 15% de los peruanos no actualiza regularmente sus contraseñas, a pesar de la conocida recomendación de cambiarlas cada tres meses. Esta práctica abre la puerta a riesgos significativos de ciberdelincuencia, por lo que necesitas claves más potentes y originales.
Las normas tradicionales de ciberseguridad dictan que las contraseñas deben ser largas, complejas y únicas para cada cuenta. Sin embargo, este proceso puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza para los usuarios al intentar recordar y gestionar múltiples claves de acceso. Aquí es donde entran en juego los emoji.
De acuerdo con expertos en seguridad digital, los emojis pueden desempeñar un papel destacado en la creación de contraseñas sólidas. Esta clase de símbolos se equiparan a las letras y signos de puntuación tradicionales, formando parte integral del estándar Unicode. Teóricamente, esto los convierte en elementos seguros y versátiles para ser incorporados en contraseñas.
El uso de emojis no solo aporta una capa adicional de seguridad, sino que también facilita la tarea de crear contraseñas prácticas y fáciles de recordar. Al aprovechar la familiaridad y amplitud del lenguaje emoji, los usuarios pueden fortalecer sus contraseñas sin sacrificar la accesibilidad.
En un mundo donde la ciberseguridad demanda soluciones innovadoras, la inclusión de emojis en la creación de contraseñas ofrece una alternativa creativa y efectiva. Más que simples adornos visuales, estos pequeños íconos pueden ser la clave para un equilibrio perfecto entre seguridad y usabilidad en la era digital.
Como existen tantos emojis, el uso de estos permite aumentar la complejidad de tu contraseña. La cantidad de emoticones estandarizados es alta, por lo que si algún ciberdelincuente pretende forzar o adivinar tu clave de acceso tendría que intentar con más de 3,600 emojis y sus variaciones. Eso sin considerar que también puedes reforzarla combinando otros símbolos, letras o números. ¿Sabías que una contraseña compuesta por cinco emojis representa una clave regular de nueve caracteres? 🤨 Ahora podrás crear una más corta de lo habitual.
Los emojis son más fáciles de memorizar. En lugar de la combinación de letras y números sin sentido, más propensas a olvidar, puedes componer una idea lógica o significativa para ti y crear un rompecabezas de emoticones con base en ella. En un traductor de emojis, por ejemplo, puedes ingresar una frase o nombre de tu película o canción favorita y el servidor te proporcionará los emojis que puedes utilizar 😎.
Los ciberdelincuentes aún no consideran a los emojis para sus tácticas y ataques. Varias de las herramientas que utilizan para descifrar contraseñas aún se limitan a incluir combinaciones de palabras, números, entre otros caracteres comunes. Entonces, cuando un atacante obtenga una base de datos de contraseñas filtradas, es probable que tus cuentas estén seguras 👾.
Algunos sitios, como Outlook o Gmail, no aceptan emojis en las contraseñas, por lo que es recomendable verificar siempre que las plataformas en las que quieras utilizar una clave de acceso con emoticones, los acepten. Considera de que los emoticones son más fáciles de usar en celular que en PC, por lo que la accesibilidad puede complicarse.
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