Había sido una de las figuras a lo largo del campeonato del elenco finalista, pero falló de manera inexplicable y en el momento menos oportuno. Cuando ya moría el primer tiempo de la final entre Boca y Tigre por el título de la Copa de la Liga Profesional Argentina, un cabezazo de Marcos Rojo no pudo ser detenido por Marinelli, quien prácticamente terminó por meter el balón al fondo de su propio arco.
A la salida de un tiro de esquina, Rojo se elevó por encima de todos y conectó de cabeza, aunque el esférico salió al centro del arco. Marinelli intentó embolsar el mismo, pero se complicó y terminó metiendo la redonda a su arco. Aunque intentó resolver, ya el balón había cruzado la línea de gol.
Tras la gran final de la Copa de la Liga Argentina, el cuadro ‘Xeneize’ es el que seguirá viendo actividad, aunque no en el torneo doméstico desde luego, sino a nivel internacional con la Copa Libertadores.
Boca se jugará su clasificación a los octavos de final del torneo continental el jueves 26 de mayo, cuando reciba en La Bombonera al Deportivo Cali por la última fecha del Grupo E, donde marcha tercero con siete unidades.
Al elenco azul y oro solo le vale ganar para así no tener que especular con el resultado del otro partido entre Corinthians y Always Ready. De lograr los tres puntos, los de Battaglia certificarán su pase a la siguiente ronda.
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