River Plate regresó este sábado a la victoria y le ganó como visitante a Lanús por 2-0, en partido adelantado de la sexta fecha del torneo de la Liga Profesional (LPF) que incluyó variadas polémicas, a partir de dos goles anulados a la entidad ‘granate’, a instancias del VAR, y una agresión a Enzo Pérez.
El duelo comenzó con el equipo de Frank Kudelka un poco mejor que los de Martín Demichelis, pero el primero fue José Paradela, a los 25′ del primer tiempo. A un minuto de que Franco Armani despejara un bombazo a quemarropa de De la Vega y salvara a River, el volante apareció en el centro del área y empujó con la zurda un centro rasante de Casco.
Cuando promediaba el segundo tiempo, Lanús había marcado el 1-1, pero el VAR llamó al árbitro Herrera, que al revisar la acción detectó que un jugador del cuadro local ubicado en posición adelantada influía en la jugada al portero Armani.
Rondando los 90 minutos, River tuvo chances para sentenciar la goleada, pero fallaron en la definición (Barco en su intento de colgar al portero, lo mandó afuera) y en el descuento hubo otro gol anulado al ‘Granate’, en esta ocasión de Franco Orozco. Y dichos fallos hicieron caótico el cierre del partido y contagiaron a las tribunas de La Fortaleza.
Porque, luego del pitazo final, los futbolistas del ‘Millonario’ intentaron regresar al vestuario visitante y en su trayecto un proyectil dio en el cuerpo de Enzo Díaz, que cayó al piso.
Fueron unos segundos de mucha tensión, con los hinchas muy nerviosos y el juez en el centro de la cancha observando todo. Escena que fue acompañada por no menos de 10 policías con escudos protectores que evitaron una tragedia en el fútbol argentino.
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