Un poco de calor para la previa en Etihad Stadium, a la espera de tener un encuentro acorde a lo que espera el hincha: un show de goles. Manchester City y Bayern de Munich abren este martes probablemente la eliminatoria más esperada de los cuartos de final de la Champions League. Dos gigantes frente a frente con el objetivo de seguir avanzando en la máxima competición europea, sin descuidar sus respectivas ligas, den onde ambos están peleando mano a mano por el título contra Arsenal y Borussia Dortmund, respectivamente.
La eliminatoria servirá, además, para poner a Erling Haaland delante de su bestia negra. Cuando ha enfrentado al Bayern Munich, el ‘Androide’ ha perdido siempre, que incluso pudo ser su equipo en vez del Manchester City, en el pasado mercado de fichajes de verano.
El futbolista noruego era objeto de deseo de los ‘bávaros’ el pasado mercado de verano como sustituto de Robert Lewandowski, pero finalmente aceptó la oferta del los de Manchester y se marchó a la Premier League, para jugar en el campeonato más competitivo en la actualidad
De acuerdo a la revista alemana Kicker, el Bayern estaba dispuesto a pujar fuerte por él. Es más, planeó romper el límite salarial histórico del club para ofrecerle un salario que satisfaciera las demandas del futbolista, para poder jugar en Baviera.
Finalmente, la oferta del City le sedujo más y no se rompió la baraja en Múnich. Para muchos, la contratación de Haaland hubiese supuesto un ‘boom’ en lo deportivo en el Allianz Arena por su conocimiento de la Bundesliga y sus grandes números en Champions. Sin embargo, al mismo tiempo, se considera que era un factor de riesgo que podía desestabilizar un ecosistema del vestuario que ha sido uno de los motores del Bayern estos años.
Cuesta pensar que el delantero más en forma del mundo tenga bestias negras, pero Erling Haaland, que ha anotado ya 44 goles esta temporada, nunca le ha ganado al Bayern Munich en partido oficial: siete encuentros contra los bávaros y siete derrotas. Ese es el balance de Haaland contra el equipo al que se mide este martes en los cuartos de final de la UEFA Champions League, un Bayern Munich que fue su rival más temido cuando militaba en el Borussia Dortmund.
Se enfrentó a los de Múnich siete veces entre la temporada 2019-2020 y la 2021-2022 y siempre perdió, aunque dejó un buen número de goles a su paso, simbolizando que estaba por encima de las actuaciones de su equipo. El noruego anotó cinco goles en esos encuentros y repartió una asistencia. Y ni siquiera jugó los 90 minutos en cada encuentro; en cinco de ellos fue sustituido y solo disputó completos dos de ellos.
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