El capitán que todo equipo necesita. Claudio Bravo no solo fue la figura de Chile durante la definición por penales ante Portugal en las semifinales de la Copa Confederaciones 2017, lo fue desde antes de que cada uno de sus compañeros se pare frente al balón y convierta su disparo en gol.
Claudio Bravo se juntó con sus compañeros, formaron una ronda y lo que llegó después fueron las palabras de arenga, pero sobre todo de confianza, del capitán chileno.
"Escuchen muchachos, me saco el sombrero ante todos ustedes. Peleamos, sufrimos, corrimos, dejamos todo adentro. No se dio, es verdad, pero ahora tranquilidad. Tenemos experiencia de sobra y nos sobran los huevos. Apoyemos a los compañeros, pase lo que pase nos vamos con la cabeza en alto", dijo el portero para motivar a sus compañeros.
Y vaya que sí funcionó, pues cada uno de los que salió a disparar su remate penal, Vidal, Aranguiz, Alexis, lo hizo de manera perfecta, pero los goles de poco hubiesen servido si Bravo no atajaba los remates de los lusos, que lo alzaron como la figura del partido.