El francés Ousmane Dembélé, lesionado desde principios de febrero, podría ser la gran novedad de Quique Setién para el partido de Champions del Barcelona ante el Napoli del próximo 8 de agosto. el francés realizó este martes trabajo específico, en una sesión en la que también participaron Antoine Griezmann y Clement Lenglet, ambos recuperándose de diferentes problemas físicos.
La sesión fue el regreso al trabajo de los azulgranas después de seis días libres en los que buena parte de la plantilla ha recargado pilas con vistas a la parte final de la temporada.
Quien no se ha integrado es Arthur Melo, que continúa en Brasil y no tiene previsto regresar a Barcelona para el retorno de la competición europea.
Dembélé se lesionó a principios de febrero y sufrió una rotura completa del tendón proximal del bíceps femoral de la pierna derecha, de la que tuvo que ser intervenido en Finlandia por el doctor Sakari Orava. El pronóstico de baja, según el parte médico oficial, se fijó en seis meses, periodo que se cumple esta misma semana por lo que podría estar disponible ante el Napoli.
El terrible historial médico de Dembélé, que ha sufrido una decena de lesiones musculares desde que llegó al Barcelona en verano del 2017, es el principal motivo por el que los servicios médicos del club, de acuerdo con el cirujano Laisse Lempainen, autor de la intervención, previeron un plazo de recuperación más largo que en la operación de 2017.
Quien no ha estado es el central uruguayo Ronald Araujo, que se lesionó el domingo durante la final por el ascenso a LaLiga SmartBank del filial contra el Sabadell, cuando sufrió un esguince en el tobillo derecho. El central tuvo que abandonar el partido en el que su equipo no pudo lograr el ascenso al caer 1-2 ante el Sabadell.
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