Barcelona y Real Madrid se miden el domingo en el último clásico de la temporada, uno en el que no hay mucho en juego en la Liga española. Y es así que lo único de lo que se habla es si habrá pasillo por parte del Madrid al club catalán tras conquistar el título liguero el pasado fin de semana. Pero sobre todo se habla de Andrés Iniesta, quien jugará su último clásico.
Si los problemas físicos no se lo impiden, el partido del domingo será el último clásico como barcelonista del 'Cerebro'; en el otro extremo están Philippe Coutinho y Ousmane Dembélé, que no jugaron en el Bernabéu y podrían estrenar su cuenta en el Camp Nou ante los madridistas.
El Madrid, mientras tanto, presenta en el coliseo barcelonista la reciente clasificación para la final de la Champions de Kiev, en la que se enfrentará el próximo día 26 al Liverpool inglés.
Por este motivo, horas antes de la nueva edición del Clásico una de las incógnitas será saber si Zidane, a la vista del desgaste acumulado ante el Bayern y la situación física de varios de los jugadores indiscutibles, recurre a numerosas rotaciones y por lo tanto a la 'segunda unidad' aún tratándose de un partido de tanta relevancia mediática e incluso para ambas aficiones.