Uno de los jugadores del FC Barcelona más afectados con la llegada de Xavi Hernández al banquillo, sin lugar a dudas, ha sido Gerard Piqué. El central catalán pasó de ser una ‘vaca sagrada’ a uno más del vestuario azulgrana. Esta temporada, por ejemplo, el exnovio de Shakira es habitual suplente. Se entiende que ya no puede ser el intocable de antes, que por delante de él hay jugadores más jóvenes que son muy importantes para el egarense. Sin embargo, por su cabeza nunca pasó jugar tan poco en el primer equipo. La situación se agravó con la llegada de Jules Koundé.
Semejante realidad ha llevado a Piqué a replantear su futuro. Tiene contrato en el Barça hasta mediados de 2024, pero no se ve calentando el banquillo hasta esa fecha. Es por esta razón que, según el diario español Don Balón, el campeón del mundo en Sudáfrica 2010 piensa en un cambio de aires.
Tal como apunta la citada fuente, al defensor catalán se le ha pasado por la cabeza marcharse en el mercado de fichajes de verano nada menos que al FC Andorra, el club de LaLiga SmartBank del que es presidente y propietario desde el 2019.
En estos momentos, el FC Andorra, tras conseguir el ascenso desde la Tercera División la pasada campaña, viene siendo la gran revelación del campeonato. En la temporada en que mantener la categoría era el objetivo, el equipo de Piqué marcha sexta y con chances intactas de llegar a LaLiga Santander.
Y 2023 es el año en el que podría consumarse el gran giro final en la carrera futbolística de Piqué. Termine como termine posicionado el cuadro azulón, el central del Barça parece decidido a salir de Camp Nou para evitar seguir siendo invisible a las órdenes de Xavi y convertirse en el referente del equipo que curiosamente preside.
Cabe recordar que Gerard Piqué juega en el primer equipo del Barcelona desde la temporada 2008-09. Antes de volver a Les Corts, el central español tuvo un paso por el Zaragoza y otro por el Manchester United, club en el que fue un jugador importante y hasta ganó una Champions League.
Luego de consultar con la dirección técnica liderada por Xavi Hernández, de cara a la siguiente temporada, el FC Barcelona decidió prescindir de los servicios de hasta 11 jugadores: Coutinho, Trincao, Puig, Mingueza, Neto, Wagué, Manaj, Alves, Nico. Lenglet y Collado.
De los mencionados futbolistas, solo Philippe Coutinho y Francisco Trincao dejaron ganancias en las arcas del Barcelona: 20 y tres millones de euros, respectivamente. Mientras que Nico, Lenglet y Collado fueron cedidos por toda la temporada.
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