Luis Rubiales renunció a su puesto como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), después de que la FIFA lo suspendiera de sus funciones debido al incidente no consensuado con Jenni Hermoso durante las celebraciones del Mundial Femenino que ganó la selección española de futbol en Australia, hace tres semanas. En un reciente comunicado, el dirigente indicó que ha informado su decisión a Pedro Rocha, quien actualmente ocupa el cargo de presidente en funciones en la mencionada organización. Además, también señaló que ha hecho lo mismo con su cargo de vicepresidente en la UEFA.
Después de 21 días desde el beso no consensuado con Hermoso tras la histórica victoria en el certamen mundialista y 15 días luego de la controvertida Asamblea extraordinaria en la que se defendió con vehemencia y criticó a todos los involucrados, Luis finalmente ha aceptado su derrota y presentó su renuncia el domingo por la noche.
“Tras la veloz suspensión realizada por FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mi persona, es evidente que no podré volver a mi cargo. Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”, notifica en el comunicado.
Antes de informar a la federación sobre su renuncia, Rubiales compartió esta decisión con Piers Morgan, periodista británico, y proporcionó algunos detalles adicionales sobre el proceso que lo llevó a tomar esta determinación: “Y entonces una actitud mía puede afectar a terceras personas muy importantes, y en esta situación es lo más inteligente y lo mejor que puedo hacer”.
En su publicación en las redes sociales, el expresidente enfatiza este punto y afirma que continuará respaldando su narrativa sobre el beso: “Debo mirar adelante, mirar al futuro. Ahora hay algo que me ocupa con firmeza. Tengo fe en la verdad y voy a hacer todo cuanto esté en mi mano para que prevalezca”.
Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, ejerció una fuerte presión para lograr la dimisión de Rubiales, quien también dejó su posición en la organización europea. Según lo reportado por la Cadena Ser, Ceferin comunicó a Luis que su permanencia en el cargo representaba una amenaza para la candidatura conjunta de España, Portugal y Marruecos para albergar el Mundial 2030.
Al respecto, Luis Rubiales, en su comunicado, dijo que adopta esta medida en beneficio del fútbol de España: “Tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030″.
La renuncia activa el artículo 31.8 de los estatutos de la RFEF, que establece que la junta directiva se transformará en una comisión gestora y procederá a la convocatoria de elecciones. El próximo presidente ocupará el cargo como máximo hasta septiembre de 2024, fecha en que concluía el mandato de cuatro años de Luis Rubiales, quien fue designado en septiembre de 2020.
Por otro lado, este domingo, en México se le dio a Jenni Hermoso, jugadora del Pachuca, una bienvenida como heroína. La reciente ganadora del título mundial fue honrada no solo por su victoria en el Mundial hace apenas 20 días, sino también por su valiente denuncia de lo ocurrido durante la ceremonia de entrega de medallas con el expresidente de la RFEF, Luis Rubiales.
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