Las cosas no andan bien en el París Saint Germain y, a pesar de la última victoria frente al Niza, los resultados deportivos de esta temporada confirman que tendrán que conformarse con ganar la Ligue 1. Esto se debe, en gran medida, al bajón innegable que ha tenido Kylian Mbappé en sus registros. Desde que volvió el Mundial Qatar 2022, donde fue subcampeón con Francia, ‘Kiki’ no ha vuelto a ser el mismo y eso ya empieza a hacer ruido en la capital francesa.
Después de haberle marcado un hat-trick a Argentina en la final todos pensaban que estábamos ante la máxima versión del atacante nacido en Bondy. Sin embargo, en lo que va del del 2023 solo ha anotado once goles, números muy por debajo de alguien de quien siempre se espera registros de escándalo.
Estos registros pierden más peso si tomamos en cuenta que cinco de ellos se los marcó al modesto Pays de Cassel, de sexta división francesa, en los dieciseisavos de la Copa de Francia. Aquel día Mbappé tuvo muchas facilidades para llegar al área y no desaprovechó las chances que tuvo.
La deuda grande de Kylian se mostró en la Champions League, donde no apareció frente al Bayern Múnich y tuvo que conformarse con solo ser titular en la vuelta. Los problemas físicos no fueron una excusa, pero el rendimiento colectivo del cuadro parisino tampoco lo respaldó en ambos encuentros frente a los de bávaros.
Si bien a estas alturas en el 2022 tenía trece goles –dos más que estos primeros tres meses y medio del 2023–, sí apareció en los octavos de final frente al Real Madrid al marcar un gol en el Parque de los Príncipes y otro en el Santiago Bernabéu. Lamentablemente no pudo hacer nada ante la dejadez de sus compañeros y la reacción madridista que minimizó cualquier intento del equipo por entonces dirigido por Mauricio Pochettino.
La motivación del francés está lejos del PSG y todos ya lo saben, incluso los directivos del club. Mientras esta semana muchos estarán disfrutando y luchando por el pase a las semifinales de la Champions League, él deberá verlo por televisión después de la eliminación que sufrieron en manos del Bayern Múnich. Esto, a pesar de que algunos en París no quieran aceptarlo, pone su continuidad en interrogante.
L’Équipe no lo perdonó y fue contundente cuando analizó su rendimiento frente al Niza: “¿Tenía realmente molestias en la cadera? Un partido decepcionante en la línea de sus últimas actuaciones. No le salió nada en el encuentro y tuvo una oportunidad muy clara en el minuto noventa”.
Aunque esto sea solo un recuento estadístico, lo cierto es que Mbappé quiere sentirse motivado y si el París Saint Germain no le da ese contexto, su estadía será más breve o, peor aún, no tendría problemas en negociar su venta antes de que finalice su contrato. Veremos si finalmente termina quedándose para ser el líder del proyecto deportivo cuando se vaya Lionel Messi, o también buscará su propio rumbo.
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