Si bien el París Saint-Germain está muy cerca de ganar la Ligue 1, sus problemas aumentan a diario y tal parece que la crisis del cuadro francés se está descontrolando. Con Lionel Messi y Neymar, figuras del elenco galo, con un pie afuera de la institución, los ultras (hinchas del club) no están de acuerdo con los directivos del equipo, motivo por el que han optado en declararse en huelga.
Eso fue lo que anunciaron este miércoles: un paro de todas sus actividades, tanto en los partidos de local como a nivel internacional. Eso sí, señalaron que todo se debe a discrepancias con la dirigencia catarí del club, a la que le exigen, entre otras cosas, que renuncie a la compra del Stade France. Esto último implicaría que la escuadra abandone el Parque de los Príncipes, donde además las selecciones del país juegan de local.
“La situación, que consideramos gravísima en varios aspectos, no debe ser subestimada y no vamos a transigir con nuestras libertades”, se lee en el comunicado que fue emitido por el Colectivo de Ultras de París (CUP) tras la reunión de este último martes.
Ojo, parte del enojo de los hinchas del PSG también guarda relación con el presidente del club, Nasser Al-Khelaifi, quien no apareció en la reunión, algo que consideraron como una falta de consideración. Por este motivo, los ultras no asistirán al Parque de los Príncipes ni en los partidos en otros estadiso, tanto en los encuentros del primer equipo como el femenino. Incluso, señalaron que tampoco estarán en los cotejos de handball, un deporte en el que los parisinos son potencia internacional.
A pesar de que en el comunicado no se dieron a conocer cuáles fueron las discrepancias con los directivos del club, más allá de lo del estadio, en las últimas semanas aparecieron diferencias sobre la política de reventa de entradas y permanencia de ciertos futbolistas del plantel, como son los casos de Lionel Messi y Neymar.
Ante ello, y por una protesta de los ultras, que se trasladaron a la casa del internacional brasileña para pedirse que se fuera de la institución, el club optó por sacarle 450 de las 900 entradas que le destinó a sus hinchas el último domingo en la visita del PSG al Troyes, por la Ligue 1.
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