En los últimos días conocimos a través del Facebook el caso de un hincha del Norwich City que, tras fallecer a los 83 años de edad, dejó 100 libras en su testamento para que los jugadores de su equipo hagan un brindis en su honor.
La última voluntad de quien en vida fue Barrie Greaves consistía en que los futbolistas del Norwich City tomen una ronda de cervezas y brinden en su nombre en recompensa a los feliz que lo hicieron mientras estaba vivo y podía disfrutar de su deporte favorito.
Desde el otro mundo, Greaves, considerado el hincha más longevo del equipo canario, verá que sus ‘héroes’ cumplieron su petición, aunque no fue con cerveza, sino con agua. Y es que al estar a solo horas de un partido de Premier League ante el Manchester United, no podían ingerir alcohol.
La hija de Greaves comentó para el diario ‘Eastern Daily Press’ que su papá incluyó a los jugadores del Norwich en su testamento para hacer un gesto que fuera divertido.
“Me hace sonreír y reír cuando lo pienso. Quería hacer un gesto que fuera divertido. Le gustaba hablar sobre el fútbol tanto como a mí me gustaba hablar sobre él”, apuntó Sarah.
Greaves fue aficionado del Norwich City desde que tenía 10 años. El maestro jubilado siempre mencionaba que su mejor recuerdo fue la actuación de los Canarios en la FA Cup de 1959.
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