Aún no tiene nada claro sobre su futuro, aunque de seguro, lo único que quiere es que de una vez por todas se acabe el 2019, un terrible año en lo deportivo para el jugador colombiano. El mediocampista apenas sumó 37 partidos este año: 28 con y nueve en su regreso al . Además de buscar mejorar ese registro, James buscará en el 2020 sentirse querido por el club al que llegue.

Ofertas, desde luego, no le faltan en el mercado de fichajes de invierno, aunque desde España han dado la sorpresa al deslizar la posibilidad de que el colombiano regrese al cuadro alemán, donde jugó dos temporadas cedido a préstamo.

“James es un jugador diferente que se enmarca dentro de los futbolistas que se dice que ‘pueden ganar un partido ellos solos’. El gran defecto del crack zurdo es la irregularidad que le ha perseguido durante los últimos años y que le ha privado de convertirse en un jugador de época en el conjunto blanco”, señala ‘Don Balón’.

Y esa irregularidad de James Rodríguez no solo se ha dado porque Zinedine Zidane no lo tiene entre sus planes (el colombiano está por detrás de Valverde, Kroos, Modric e Isco), sino también debido a sus constantes lesiones, especialmente la sufrida recientemente en la rodilla izquierda.

El principal problema para que se concrete el regreso de James al Bayern Munich sería el económico, pues Florentino Pérez no contempla venderlo por menos de 50 millones de euros, a pesar de su posible desvalorización al no haber tenido una continuidad reciente.

James Rodríguez tiene contrato con el Real Madrid hasta junio del 2021, por lo que - si no se marcha en este mercado de invierno - el Real Madrid debe fijar su venta a más tardar en el próximo mercado de verano.

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