Liverpool y Flamengo se ven las caras en Doha por la final del Mundial de Clubes 2019. Los dirigidos por Jurgen Klopp toman la iniciativa del encuentro pero los de Jorge Jesús no bajan los brazos y apuestan por su máximo goleador, Gabriel Barbosa, quien tuvo en sus pies la apertura del marcador.
A los 52 minutos de juego, el brasileño recibió el balón dentro del área y con un potente giro hizo exigir a Alisson, quien se estiró y evitó el 1-0.
Liverpool, campeón europeo, aspira a conseguir su primer Mundial de Clubes, una competición maldita para ellos con tres derrotas en tres finales disputadas (1981, 1984 y 2005). En dos de esos de esos sonados tropiezos tuvo a equipos brasileños como rivales.
En 2005 cayó ante el Sao Paulo (1-0) y en 1981, cuando aún se llamaba Copa Intercontinental, salió goleado 3-0 frente a su adversario de este sábado, el Flamengo, que aspira a repetir la gesta en tierras cataríes.
Jorge Jesus, entrenador de Flamengo, ha mentalizado a los suyos para la gran decisión, a la que accedieron tras ganar en semifinales al Al Hilal saudí de André Carrillo, en la enésima remontada del equipo (3-1).
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