Uno de los goles que más grité de mi querido Bolognesi fue el de Masakatsu Sawa en el triunfazo 2-1 ante el Colo Colo de Chile por segunda fase de la Copa Sudamericana.El partido fue el 12 de setiembre de 2006 y un día antes conversé con el entrenador de mi equipo, Jorge Sampaoli. Lo encontré en la esquina de Piamonte (solo para conocedores) y me dio el título de esta columna.
El ‘Bolo’ llegaba de eliminar a San Martín y tenía un plantel parejo y sin estrellas. Los jugadores sabían que con Sampaoli todos debían correr. Siempre. Al ‘Hombrecito’ le gustaba el vértigo y llegar rápido al arco rival (características que mantiene). Recuerdo a Penny, Martorell, el ‘Chasqui’ Álvarez, ‘Manzana’ Hernández, ‘Cachito’ Ramírez, Johan Fano y Sawa. El estadio Tacna (ya saben que siempre lo llamaré así) estaba repleto con un buen número de hinchas chilenos.
Al ‘Cacique’ lo dirigía el ‘Bichi’ Borghi. ¿Sus figuras? Matías Fernández (¿te suena?), Arturo Vidal (¿lo conoces?), Rodrigo Meléndez y el ‘Chupete’ Suazo. Los sureños eran sensación en su país y llegaron a la final de la ‘Suda’ (la perdieron ante Pachuca de México).
El primer tiempo terminó sin goles. Para el reinicio se adelantó la visita, pero al toque empató Fano. Sobre el final, Sawa le dio vuelta al partido. Cómo gritamos ese gol. Inolvidable. La vuelta en Santiago fue otra historia. Cuento los días para ver al ‘Bolo’ nuevamente jugando esos partidazos. Ya volveremos. Bendiciones.