España festeja. Portugal le ponía las cosas complejas en octavos de final, colocándolo segundo en el grupo B; sin embargo, el gol al último minuto de Iago Aspas ante Marruecos y el penal anotado por Irán cambiaron la historia.
El atacante del Celta de Vigo recibió el centro dentro del área y con un gran gesto técnico de taco, pudo impactar el balón a los 93 minutos y gritar el 2-2 parcial. El tanto fue una verdadera obra de arte y fue aplaudida por todo el estadio de Kaliningrado.
Los españoles no pudieron festejar el tanto de inmediato debido a que el árbitro asistente levantó el banderín, pero el VAR corrigió y el colegiado principal logró confirmar la anotación para darle la primera ubicación a la 'Roja'.
Fueron una suma de resultados. Portugal empató con Irán y le dio el puesto a España. Ahora, los dirigidos por Hierro tendrán que jugar ante Rusia por los octavos de final del Mundial Rusia 2018.