Entre Suiza, país en el que nació, y Croacia, la patria de sus padres, Ivan Rakitic tomó una decisión que le ha permitido jugar el domingo la final del Mundial Rusia 2018 contra la selección de Francia, pese a que con el equipo nacional helvético llegó a jugar en categoría juvenil.
El fútbol suizo ha crecido mucho gracias a jugadores con orígenes muy diversos, con casos llamativos dentro de una misma familia como en casa de los Xhaka, donde Granit decidió jugar con Suiza y su hermano Taulant con Albania, el país de sus raíces familiares.
Rakitic nació en Rheinfelden, en el cantón de Argovia, cerca de Basilea. Creció en Möhlin, pequeña ciudad de 11.000 habitantes, donde su padre, huyendo de la guerra en Yugoslavia, había creado en 1993 el club NK Pajde Möhlin, donde Ivan empezó su camino.
Después se unió al Basilea, antes de pasar a los 19 años al alemán Schalke 04. En la Federación Suiza de Fútbol seguían siempre de cerca su evolución.
"El potencial estaba ahí, no había dudas sobre ello en las selecciones suizas. Luchamos para que se quedara con nosotros", confió a la AFP Bernard Challandes, entonces seleccionador juvenil del país helvético.
En aquella época, el reglamento era diferente y un jugador que disputaba un partido oficial con una selección juvenil no podía luego optar por defender a otro país.
"Siempre fue claro y explicaba que no había tomado todavía su decisión. Así que se le convocaba únicamente para partidos amistosos", explica Challandes, que es ahora seleccionador de Kosovo.
En septiembre de 2007, Rakitic debutó finalmente con Croacia y desde entonces ha defendido a ese país en dos Eurocopas y dos Mundiales.
"Sé de dónde vengo. He crecido en Suiza, estoy orgulloso de haber jugado con Suiza en juveniles", explicaba recientemente Rakitic en una entrevista al diario suizo Le Temps.
"Estaba decidido en favor de jugar con Croacia y no de Suiza", añadió. Por ello, en aquel momento, decidió primero comunicárselo al seleccionador suizo de entonces, Köbi Kuhn, y al croata, Slaven Bilic.
Rakitic, de 30 años, está casado hoy con una mujer andaluza que conoció durante su etapa en el Sevilla y "ha llevado su carrera de manera muy inteligente", buscando siempre cómo progresar, hasta llegar al Barcelona y a su madurez como jugador, estima Challandes.
FUENTE: AFP