Suecia y Suiza jugaban por los octavos de final del Mundial Rusia 2018. Los rojos se encontraban abajo en el marcador y se despedían del torneo. Todos los jugadores decidieron ir el busca del gol del empate, dejando poco protegida la defensa, provocando un contragolpe casi letal.
A los 94 minutos, los suecos llegaron al campo contrario con tres toques y dejaron absolutamente solo a Olsson, que con una gran corrida parecía tener el gol a boca de jarro; sin embargo, Lang lo empujó.
El defensor vio la roja y el árbitro cobró penal, pero la duda ingresó de inmediato ¿fue dentro o fuera del área? El colegiado fue avisado por el VAR y fue a la pantalla a revisar la jugada.
Luego de observar el hecho unas cuantas veces, se retractó y no cobró la pena máxima; sin embargo, decidió dejar la tarjeta roja a Lang debido a que cortó una jugada manifiesta de gol que pudo ser el 2-0.