La actriz cubana Isabel Moreno ha dejado una gran tristeza en el plano artístico de América Latina tras confirmarse que falleció el 9 de junio, en Miami, Estados Unidos, a la edad de 82 años. El Consejo Nacional de las Artes Escénicas de Cuba confirmó la noticia, la cual fue ampliamente difundida por medios de comunicación de todo el continente.
Moreno, con su partida de este mundo, dejó un legado impresionante en la industria del entretenimiento, con una carrera que abarcó más de seis décadas y que la llevó a destacarse en teatro, cine y televisión. Sus primeros pasos como actriz los dio en la década de 1960 en su natal Cuba, donde cultivó su talento y ganó reconocimiento en el medio artístico, pero sabía que debía salir adelante también en otros mercados.
Aunque inicialmente se dedicó principalmente al teatro, Moreno incursionó en la televisión en la década de 1980, lo que le permitió ampliar su audiencia y ganar reconocimiento a nivel nacional e internacional. Su participación en exitosas telenovelas como “Gata Salvaje” y “Tierra de Pasiones” la consolidaron como una de las actrices más queridas y respetadas en el mundo hispanohablante.
En 2002, Moreno tomó la decisión de migrar a Estados Unidos, donde continuó su carrera con éxito, participando en producciones televisivas que cautivaron al público hispanoamericano. Su trabajo en telenovelas venezolanas como “Amantes de Luna Llena” y “Más que Amor, Frenesí” también la llevaron a ser reconocida en nuevos horizontes, preparándola para su eventual llegada a Miami.
A su llegada a Miami, Moreno se encontró con nuevas oportunidades en la industria del entretenimiento, siendo su papel en la telenovela “Gata Salvaje” en 2002, uno de los momentos clave que marcó su carrera en Estados Unidos interpretando a Mercedes Salazar. A lo largo de los años, continuó participando en diversas producciones, dejando una huella imborrable en la televisión hispana.
Así mismo, se le conoce por haber participado en la producción “Betty en NY” del año 2019, donde trabajó como “Inesita”. Pese a su éxito en el mundo del espectáculo, Moreno siempre fue consciente de los desafíos que enfrentaban los artistas, especialmente los cubanos que buscaban establecerse en Miami. En entrevistas, compartió su experiencia sobre la necesidad de reinventarse y buscar otras fuentes de ingresos fuera de la actuación debido a la inestabilidad económica del medio.
La noticia de su fallecimiento ha conmocionado a sus colegas y seguidores, quienes recuerdan con cariño su talento, profesionalismo y pasión por su trabajo. Hasta el momento, no se ha revelado la causa de su muerte, dejando a sus admiradores con el recuerdo de una vida dedicada al arte y al entretenimiento. La partida de Isabel Moreno deja un vacío en la industria, pero su legado perdurará a través de su inolvidable contribución al mundo del espectáculo.
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