La República Dominicana vuelve a ver la partida de uno de sus artistas tras confirmarse la lamentable partida de Janni Viloria, recordada bajista que fue parte de Las Monumentales Chicas del Can.
A lo largo del tiempo, la reconocida bajista formó parte de algunas bandas musicales, pero su mayor éxito y popularidad la obtuvo cuando formó parte de Las Monumentales Chicas del Can, trabajo por el que se le recuerda hasta la actualidad, pues marcó a una generación entera con sus canciones, al igual que la versión antecesora de dicho grupo.
Si bien la noticia causó revuelo en su país natal, también generó eco en diversas partes de América Latina, donde Viloria tenía varios fanáticos, quienes evidentemente han sentido la curiosidad de saber qué ha pasado con ella y a qué se debe su partida a una edad tan joven. Es por ello que ahora vamos a ahondar en lo que se sabe.
Medios de República Dominicana informaron que Janni Viloria había fallecido el pasado domingo 14 de enero y, posteriormente, en las redes sociales de Las Monumentales Chicas del Can se confirmó la desagradable noticia cuando se compartió una publicación en modo de homenaje por su trayectoria.
Las fuentes oficiales o cercanas a la artista no han hablado a detalles sobre lo ocurrido, pero la prensa local indagó y dio a conocer más acerca de esta repentina partida. De acuerdo con lo que se ha informado, Viloria perdió la vida luego de haber sido inducida al coma tras una cirugía cerebral a la que se habría sometido.
No se sabe con exactitud desde cuando estaba en ese estado, pero trascendió que dicha operación se habría producido por un cáncer que tenía y, para mala suerte de ella y sus seres queridos, el tratamiento no dio los frutos que se esperaba, originando que se apague su vida con tan solo 54 años de edad.
Janni Viloria nació el 30 de septiembre de 1969 en San Francisco de Macorís, provincia Duarte y era la segunda de tres hermanos. A diferencia de otros chicos de su edad, cuando era una adolescente, se interesó en el mundo de la música al punto de aprender a tocar guitarra y leer partitura, en un claro gesto de que quería dedicarse a eso en un futuro.
Unos años después aprendió a tocar el bajo, instrumento por el que se apasionó mucho, así que dedicó todos sus esfuerzos en perfeccionar su técnica, lo cual ayudó muchísimo a sus aspiraciones, ya que entraría a una banda musical llamado Grupo Mandarina en el año 1990, pero lo mejor aún estaría por venir.
Las Chicas del Can, agrupación femenina de gran éxito por todo el continente, en 1992 regresaría a la escena artística con una nueva versión que fue bautizada como Las Monumentales Chicas del Can y ella fue contratada para seguir demostrando lo mejor de su arte. Con ese conjunto, visitaría varios países y se haría más conocida.
Ella también desarrolló una vida familiar, como la mayoría de las personas, es por ello que tiene a varios que lloran su partida. A Viloria le sobreviven sus hijos Jennifer y Brandon, dos nietos y su esposo, el saxofonista Julio César Cheaz Cuello.
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