Otra baja más. El Real Madrid regresó a los entrenamientos unas horas después de empatar en el derbi de la capital ante el Atlético de Madrid, con una sesión en su ciudad deportiva sin Gareth Bale, último jugador en caer lesionado en una mala racha que deja a Julen Lopetegui sin Isco Alarcón ni Marcelo.
Mientras Gareth Bale se sometió a pruebas médicas que determinaron una lesión muscular, después de retirarse en el descanso del derbi madrileño, el resto de la plantilla madridista cambió el chip de la Liga al de Champions League, con el CSKA como próximo rival.
El poco tiempo de separación entre partidos, el Real Madrid juega el martes en Moscú, obliga a Julen Lopetegui a cuidar al máximo a sus titulares. Sesión de recuperación para todos y tan solo tres, Nacho Fernández, Toni Kroos y Casemiro, en el césped unos minutos para soltar piernas con una suave carrera continua.
Sin Isco, de baja tras operarse de apendicitis, y Marcelo por una rotura muscular, los suplentes y no convocados trabajaron con mayor intensidad. Entre ellos se ejercitó con normalidad Álvaro Odriozola, descartado en los últimos partidos después de haber sido titular ante el Espanyol.
El brasileño Vinicius Junior también integró el grupo, entrenándose con intensidad después de consumar su debut con el primer equipo del Real Madrid en los últimos compases del derbi madrileño y aspirando a viajar a Moscú para debutar en Champions League.
Con información de EFE