Los años 2005 y 2007 fueron muy importantes para Argentina en cuanto a torneos juveniles. Las estrellas del momento empezaban a decaer, y necesitaban saber que tenían jugadores jóvenes en quienes depositar toda su confianza para los siguientes años.
Es allí donde aparecieron los campeones juveniles. Lionel Messi fue la gran figura del Mundial del 2005, donde el argentino fue el goleador y también fue elegido como el mejor jugador del torneo.
En el 2007, fue Sergio Agüero quien se convertiría en la máxima figura argentina. El jugador, que en ese momento era el capitán y llevaba la '10' en la espalda, fue el ganador del Balón de Oro en dicho torneo.
LEE TAMBIÉN…