Neymar está del todo cómodo en el PSG. A pesar de jugar hace más de un año en París, el brasileño tiene intenciones serias de salir del equipo. Barcelona es su objetivo. Pero no la tendrá tan fácil luego de su abrupta salida en julio del 2017. Para lograrlo tendrá que tomar la iniciativa.
Según Mundo Deportivo, es cierto que los miembros de la secretaría general, directivos, empleados y jugadores han mostrado apertura para su llegada; sin embargo, Neymar tiene que ser el primero en levantar el teléfono y conversar con Bartomeu, presidente del Barza, con quien no terminó muy bien.
Bartomeu ya ha mencionado que la decisión pasa por el técnico, pero obviamente también es necesario que 'Ney' retire las demandas que tiene interpuestas contra el Barcelona, donde reclama la prima de renovación.
Neymar no podrá cobrar ma´s que Messi, quien está y estará en lo más alto del escalafón salarial, ni tampoco podrá anar lo que ganaba en el PSG. Igualmente, tendrá que mostrar su arrepentimiento por irse y reconocer que se equivocó.
Lo más difícil sería convencer a Nasse Al-Khelaïfi, presidente del PSG, que tendría que dejarlo salir por un precio razonable. El equipo azulgrana no quiere problemas con los franceses.