A diferencia de Iniesta, Neymar o Xavi, no a todos los jugadores que salen del FC Barcelona les va bien. Ese es el caso de Alexander Song, campeón de Liga Santander con los azulgranas en el 2013 y que recientemente ha revelado el tormentoso año que le tocó vivir en su paso por el fútbol ruso.
El jugador camerunés de 31 años contó en una entrevista al diario 'The Telegraph' que durante su estancia en el Rubin Kazán, tuvo que arreglárselas para vivir en la sede del club ya que nunca le entregaron la casa que le prometieron. Le fallaron en los pagos y ni amigos tenía.
“Cuando firmé me dijeron que me darían una casa pero luego, pasaban los meses y no la tenía. Al final, me sacaron del hotel y tuve que vivir en la ciudad deportiva. En el club seguían diciéndome que tenía que esperar a que acabasen la casa. Un día hablé con una de las encargadas de diseñarlas y me dijo que nadie le había encargado nada”, contó el exjugador del FC Barcelona.
Song aseguró que se sintió muy solo. “Pasaba el tiempo sentado en mi habitación y nunca encendía la luz. Estaba siempre con mi ordenador, sin televisión siquiera porque no entendía nada al estar en ruso. Toda mi vida se basaba en un ordenador y un móvil y eso no es sano. Para ser honesto, no se ni por qué no encendía las luces”.
Llegaron los problemas económicos
Song reveló también que el Rubin Kazán se atrasó con sus pagos y las deudas que tenía con los bancos en Inglaterra empezaron a atormentarlo.
“El club me decía que el dinero llegaría a mí cuenta, pero eso nunca sucedía. Tienes hipotecas y más gastos y hay que seguir pagando. Tenía una hipoteca en Londres y el banco me preguntaba por mi dinero. Esa fue la peor parte”, concluyó Song.